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La organización del trabajo influye en uno de cada tres accidentes

Una investigación del Instituto de Salud Pública y Laboral de Nafarroa constata que un tercio de los accidentes laborales está relacionado con la organización del trabajo. En segundo lugar se encuentran las causas relacionadas con deficiencias en la prevención de riesgos.

Casi uno de cada tres accidentes laborales tiene su causa en factores relacionados con la organización del trabajo, como un método de trabajo inadecuado o inexistente, unas instrucciones insuficientes o una selección incorrecta de equipos.

Le siguen en importancia, con un 21%, las causas relativas a la prevención, como la no identificación de riesgos, la ausencia de mantenimiento o la no adopción de medidas preventivas, mientras que el tercer lugar lo ocupan las causas relacionadas con factores individuales del trabajador, con un 18%.

Estos datos son el resultado de una investigación realizada por el Instituto de Salud Pública y Laboral de Nafarroa, que ha analizado un total de 120 accidentes laborales ocurridos el pasado año, de los que cinco fueron mortales; 37, graves; 73, leves; y 5 sin baja médica.

Señala, asimismo, que en un 12,62% de los casos la empresa no disponía de evaluación de riesgos. En los que sí la habían realizado, se había detectado el riesgo objeto del accidente en el 58,89% de los casos y se habían propuesto medidas preventivas en la mitad de ellos (52,22%), pero sólo se habían adoptado en un 16,67%.

En cuanto a las causas, independientemente de la gravedad de las lesiones sufridas por la persona accidentada, las relativas a la prevención y a la organización del trabajo suponen el 50% del total. También destacan los factores personales individuales, como la permanencia del trabajador en una zona peligrosa, la anulación de protecciones de seguridad o la deficiente asimilación de las órdenes recibidas, que supusieron el 18%.

Recortes en prevención

También UGT de Nafarroa hizo público ayer un estudio realizado por su departamento de Salud Laboral, en el que concluye que el repunte de la siniestralidad que se ha producido en los dos últimos años en el herrialde coincide con los recortes acometidos por las empresas en prevención de riesgos.

La secretaria de Acción Sindical y Salud Laboral, María Simón, indicó que «la respuesta de las empresas a la crisis económica se ha materializado por dos vías: costes de personal y condiciones de trabajo. En el primer caso, se ha traducido en ajustes salariales y de plantilla, y en el segundo, entre otras cosas, se ha sacrificado la seguridad como vía de ahorro».

El informe incide en que la crisis económica se ha traducido en la reducción de la inversión de las empresas, de manera muy significativa las pymes, en medidas preventivas. El estudio ha abarcado a 200 empresas navarras, en su inmensa mayoría microempresas o de menos de 50 trabajadores, correspondientes a los sectores del Metal, Comercio y Hostelería, Agroalimentario, Servicios Privados, Químico y Afines, y Residencias de la Tercera Edad.

UGT considera que la gestión de la prevención es «insuficiente y deficiente», ya que aunque prácticamente todas las entidades analizadas ha realizado la evaluación de riesgos (el 99%), como establece la legislación, se han detectado «importantes deficiencias»; por ejemplo, que buena parte de las evaluaciones no se han revisado desde hace años y que, además, no contemplan todos los aspectos relacionados con el trabajo.

Un 81% de las empresas cuenta con una planificación preventiva, pero solo en un 18% de los casos resulta eficaz, ya que en la mayoría «no se concretan las medidas preventivas, ni los responsables de ejecutarlas, ni el presupuesto asignado, ni los plazos de ejecución», según el estudio.

Asimismo, recoge que el 70% de las empresas ejerce una deficiente vigilancia de la salud de sus trabajadores y que solo un 9% ha identificado los trabajos de especial peligrosidad.

El sindicato pone en relación las deficiencias en materia preventiva con otras consecuencias de la crisis como el aumento de la temporalidad y la parcialidad, la subcontratación y la falta de experiencia laboral, como principales factores desencadenantes de los accidentes de trabajo.