Joseba VIVANCO
Athletic

No solo los errores se pagan

Dos jugadas puntuales penalizan a un equipo rojiblanco que no ofreció su mejor versión ante un Madrid superior futbolísticamente.

ATHLETIC 1

REAL MADRID 2


Nadar para morir en la orilla... Frase tantas veces recurrida para explicar lo que le pasó anoche al Athletic. Es verdad que en el cómputo global el Madrid fue mejor y ganó por goleada en la estadística de remates a portería. Y que el Athletic no fue el esperado. Pero también que los rojiblancos dieron la cara sobre todo en una segunda mitad plena de emoción, hicieron lo más difícil que fue igualar la contienda y echaron por la borda todo lo que habían remado mientras aún festejaban el premio. Toca seguir nadando porque el agua llega ahora un poco más al cuello.

Partido grande en la grada, tensión futbolística desatada por momentos en el césped. Hubo más pitos para Mateu Lahoz que para Cristiano Ronaldo al ser anunciados sus nombres por megafonía, luego el portugués tocó su primer balón y el respetable entonó su primer «uuuh», justo hasta que al primer minuto un choque aéreo entre Raúl García y Pepe hizo saltar a la gente de su asiento. El choque del año en San Mamés se jugaba también en el graderío, porque abajo, sobre la hierba, el Madrid iba a ser superior en una primera mitad marcada por el desacierto cara a gol por ambas partes, y por el gravísimo error de San José que rompió al minuto 20 un juego igualado que no se decantaba para ningún lado.

Dos partidos en cuarenta y cinco minutos. Un antes y un después del 0-1 de Benzema tras la mala devolución de San José desde la frontal del área a pase de Iraizoz. Quizá el portero no debió dársela con el francés y Ronaldo tan cerca, quizá alguien debió avisar al de Atarrabia de ello, quizá ‘Sanjo’ pecó de exceso de confianza... El gol rompió el equlibrio, el Athletic dudó diez minutos en los que el Madrid pudo sentenciar, pero reaccionó de manera positiva y en ese toma y daca en el que entró el choque, hasta pudo irse al descanso con el empate o incluso hacerlo con una ventaja a favor de los merengues aún mayor.

Hasta el gol, Varane había andado más rápido que Aduriz en un pase filtrado de San José y Benzema había avisado varias veces ante Iraizoz. El balón era blanco y hasta el minuto 11 no llegó la primera posesión larga de los leones. Llegó el gol, reaccionó bien San Mamés, pero le costó contagiar ese ánimo a su equipo. En ese interín, Ronaldo, Benzema, Kroos tuvieron sus ocasiones, hasta que Sabin Merino cabeceó fuera un centro y el Athletic le volvió a tomar la medida al partido. Empezó de cero. Sin mirar al luminoso. Y en ese último cuarto de hora, el alto voltaje de la grada se trasladó al campo. Fueron los mejores minutos en ataque de un Athletic al que hasta entonces le había faltado profundidad. Primero una gran jugada de Susaeta que Raúl García no acierta a rematar y termina golpeando con el puño el poste llevado por la rabia. Rugía San Mamés. La réplica, remate de Kovacic que Iraizoz repele a una mano. La contrarréplica, cabezazo de Aduriz en balón prolongado por Balenziaga que Keylor Navas saca abajo. Partido loco que despidió en su primera mitad de nuevo Kovacic con un disparo a bocarajarro que el guardameta navarro sacó con un pie.

A lo loco se vivía mejor, debieron de pensar los rojiblancos, que decidieron entrar al cuerpo a cuerpo con el Madrid en ese tramo final, y salieron con las mismas intenciones de vestuarios. Aduriz avisó nada más saltar en un disparo que Navas desbarató. Los leones aceleraron pulsaciones, se fueron con todo hacia la portería blanca, pero casi siempre llevados por la precipitación, por la imprecisión de su última acción... El Athletic de esas segundas partes en San Mamés, espoleado por los deberes mal hechos en las primeras. Aupado en una grada metida de lleno en el duelo pero que por desgracia no mete goles.

Iban con todo los de Valverde, trataban de buscar una buena contra los de Benítez. Aduriz la tuvo en un remate cercano que se topó con un defensor y el «Jo ta ke!» resonaba en el graderío. El propio donostiarra la volvía a tener pero ni llegaba a conectar con la pelota... El Athletic volvía a jugar en el alambre, como tantas veces, y ahí que aparece un arranque de león de Laporte, desde su área, la sube, la pelea, la gana, cede a Susaeta que la pone de Zinemaldi al segundo palo para que el de Urduliz, Sabin Merino, en plancha, la cruce a la red y rompa la imbatibilidad de Navas. Apoteósis.

Estados de ánimo que provovan estados de gracia. Fútbol. El Athletic. Apenas duró tres minutos. Hasta que Benzema volvió a cazar otro balón en el área pequeña a centro desde la banda de Isco, precedido de quince pases. A Ernesto Valverde le llevaban los diablos. A San Mamés también. Todos se encomendaron a Aduriz. Y el ‘zorro’ la tuvo, hasta por dos veces, pero no era su noche. El Madrid, agobiado por el empuje bilbaino, nadó y guardó la ropa. Le fue suficiente. Eso y un portentoso Keylor Navas que lo iba a parar casi todo por no decir todo.

Esta vez al Athletic no le valió su empuje, ni el de su grada, porque amén de que el Madrid tuvo sus ocasiones y fue superior en el juego, fueron al final dos detalles puntuales, un error y un desajuste el que les dilapidó, primero, su tú a tú en la contención, y luego su reacción. Nueva derrota, peor versión de la esperada. Anoeta, nueva final. Y esta hay que ganarla ya.

«El segundo nos ha condenado»

«En este partido ha habido de todo, momentos en que hemos estado bastante flojos, momentos en que a pesar de que el partido tenía dificultad hemos creado ocasiones, pero ellos eran dueños del partido, nuestra presión no era efectiva, y hemos perdido balones que nos podían hacer el 0-2. En el segundo tiempo hemos dado un paso adelante, más convicción y a base de eso hemos empatado, pero incomprensiblemente en vez de seguir con esa inercia de meterles arriba, hemos dado un paso atrás y hemos vuelto a ver cómo juegan ellos, y nos han encontrado el jugador que estaba libre y nos han hecho el segundo. Era ir otra vez contracorriente. Ese paso atrás que hemos dado nos ha condenado», fue la valoración de Ernesto Valverde sobre la derrota. «Lo que cuenta ahora es la clasificación, tenemos que mirar adelante. Porque esto lo arrastras. De esto siempre hemos salido todos juntos», enfatizó. «Hay que ir a ganar a Anoeta», dijo. J.V.

Benítez destaca el buen juego y el carácter mostrado

Rafa Benítez dijo estar «contento porque el equipo ha mostrado dos caras, una con posesión y otra de carácter, de sacrificio ante un equipo que ha apretado. Hemos salido reforzados». Varene habló de que «hemos sufrido juntos, como equipo» y es que Benítez habló de que por primera vez su equipo tiró de garra para ganar.

Valverde disculpa a San José en el primer gol

«Un día metes un gol desde medio campo y ganas un título y otro haces una de estas...», disculpó Ernesto Valverde el grave error de Mikel San José en el primer gol, y que dejó ‘tocado’ al jugador el resto del partido. Valverde se acordó de otros errores similares la temporada pasada que penalizaron mucho a su equipo.