GARA
Sana’a

Gobierno yemení y hutíes comienzan un canje de más de 600 prisioneros

Los rebeldes hutíes y el Gobierno de Abdo Rabu Mansur Hadi, comenzaron ayer un proceso de canje de más de 600 prisioneros en el sur del país, un día después del inicio del alto el fuego entre ambos bandos, que se acusan mutuamente de su incumplimiento.

El movimiento rebelde de los hutíes y las milicias del presidente yemení, Abdo Rabu Mansur Hadi, acordaron un intercambio de prisioneros, que comenzó ayer, en el marco de las conversaciones de paz tras el alto el fuego que entró en vigor el 15 de diciembre y que se prolongará hasta el día 21, y de cuyo incumplimiento se acusan ambas partes.

El canje incluye 360 combatientes hutíes y 265 miembros de los Comités de Resistencia Popular, leales a Hadi, que fueron capturados durante los enfrentamientos en la ciudad de Adén y otras zonas sureñas.

Se trata del primer intercambio en el marco de la actual tregua y del proceso de negociaciones de Suiza, que tiene en su agenda la liberación de detenidos. Además, es el mayor canje desde que estalló el conflicto en marzo pasado y, según fuentes hutíes, se logró gracias a los esfuerzos de mediadores tribales. El intercambio se efectuó en la zona de Yafea, entre las provincias de Al-Baida –bajo control hutí– y de Lahesh –controlada por las milicias leales a Hadi–.

Los Comités de Resistencia Popular lograron expulsar a los hutíes y sus aliados de Adén y otras cuatro provincias sureñas en julio gracias al apoyo militar y los bombardeos de la coalición árabe que lidera Arabia Saudí.

Las partes en conflicto comenzaron el martes una nueva ronda de negociaciones bajo mediación de la ONU en Suiza, con el fin de terminar con una guerra en la que han perdido la vida ya más de 6.000 personas y que tiene al 80% de la población dependiendo de ayuda humanitaria. El tema prioritario esta semana es, además de la implementación del alto al fuego y la liberación de prisioneros, el acceso de ayuda humanitaria para la población. Aunque ambos bandos se han acusado de efectuar ataques y no respetar el cese de hostilidades, se trata de hechos aislados y la situación sobre el terreno se mantiene relativamente estable.

El general de Brigada Sharaf Luqman, portavoz de las fuerzas yemeníes Ali Abdullah Saleh, aliado de los hutíes, denunció «una grave escalada por tierra, mar y aire protagonizada por la alianza» en Hodaida, a orillas del Mar Rojo, y en Taíz, en el suroeste de Yemen. Y advirtió de que «no permaneceremos con los brazos cruzados y responderemos con fuerza».

La agencia Saba New, controlada por el Gobierno, informó de la muerte de 17 personas en un bombardeo hutí en Taíz. El general Ahmed al-Asseri, portavoz de la coalición saudí, reiteró su compromiso con la tregua pero también su disposición a responder a cualquier incumplimiento.