Joseba VIVANCO
Athletic

Una certeza y cuatro dudas

Tercera clasificación europea consecutiva, algo que no se conseguía desde hacía treinta años. Primer objetivo cumplido a falta de poner la guinda con esa quinta plaza. Sin embargo, al club le quedan cabos por atar, como el futuro de Laporte o Gurpegi.

«Quizás ahora no nos damos cuenta de lo que está logrando este equipo, pero jugar en Europa tantos años seguidos y, además, con buenos resultados en Copa lo valoraremos más en unos años». Palabras este lunes del ‘potrillo’ Iñigo Lekue, uno de los afortunados en vivir en su primer año tantas experiencias con el primer equipo. El Athletic alcanzará esta temporada los 62 partidos, una cifra solo superada, con 63, en el primer curso de Marcelo Bielsa en que se alcanzaron dos finales. El club europeo que más encuentros suma en sus piernas.

Es verdad que ante el Levante la imagen de los rojiblancos no fue como para ganarse el sueldo y bien de cera que han recibido si uno lee las crónicas del lunes. Es más, los leones llevan ya unas cuantas jornadas en las que las lesiones y el fuelle les están pasando factura, con partidos poco aseados, faltos de ideas pero que han logrado sacar adelante por su condición de no rendirse ni con un 2-0 en el minuto 88. Y del mismo modo que nadie se acordará del empate ante el Granada en casa y la pobre traza mostrada, el esperpento firmado frente a los levantinos no será siquiera un apunte a pie de página de esta temporada. Porque lo que permanecerá es que por tercer año consecutivo el Athletic se ha metido en Europa, por primera vez en los últimos treinta años. Y se dice pronto. Seis presencias continentales en los últimos ocho. Casi nada.

A los chicos de Ernesto Valverde el curso se les está haciendo larguísimo. Como a todos. La diferencia con respecto a equipos como el Valencia o la Real, en los que más allá de la autoexigencia a estas alturas exigida por el entorno tampoco tiene mucho más en juego, radica en que a los bilbainos todavía se les demanda más, cada partido, cada semana. Y eso es bueno, porque mantiene al club y al equipo vivos y en niveles de exigencia otrora desconocidos. Pero siempre con los pies en el suelo. Porque tras meterse en Europa, ahora se reclama la quinta plaza y si el domingo ante el Celta se gana y se da un gran paso, se querrá ganar al Sevilla la última jornada y que nadie baje los brazos hasta el banderazo final. Y el fútbol no es ciencia exacta, ni los jugadores robots. Y la temporada está siendo muy larga.

El Athletic ha cumplido con creces, ese ansiado quinto puesto mediante. Sin embargo, lejos de que en el club se dejen llevar hasta las vacaciones, quedan algunos flecos pendientes y nada banales que requerirán desvelarse en próximas semanas:

El futuro de Laporte, sin prisa

El club se ha reunido ya con el central de Agen y le ha transmitido sus intenciones para con él, si bien a día de hoy y con la temporada sin acabar no parece que su futuro inmediato se resuelva en cuatro días. Todavía queda mucho que rascar. Las intenciones oficiosas del Manchester City están sobre la mesa y si nos atenemos a las habituales manifestaciones del jugador cuando se ha informado de otras ‘novias’, no parece que él vaya a forzar nada. Está contentó en Bilbo y eso es un plus. Lo que el Athletic pueda ofrecerle económicamente en su enésima renovación y hasta dónde esté Ibaigane dispuesto a llegar serán claves en las negociaciones que se den.

Gurpegi lo dirá antes del Sevilla

Será antes de finalizar la Liga, es decir, antes de que el Sevilla visite San Mamés cuando el gran capitán Carlos Gurpegi anuncie de manera pública si cuelga o no las botas. No ha trascendido nada al respecto, pero la realidad es que el navarro solo ha participado en 13 partidos ligueros cuando la anterior campaña lo hizo en 23 y en 27 en las dos precedentes. En caso de decir adiós, desde luego que la última jornada, frente a los andaluces, sería una idónea despedida a la altura de la de Andoni Iraola.

Herrerín o Arrizabalaga

Gorka Iraizoz será uno de los dos porteros del primer equipo la próxima campaña. Es lo único fijo de puertas afuera sobre la portería rojiblanca, donde la dirección deportiva de Lezama deberá elegir entre dar continuidad a Iago Herrerín o apostar de manera decidida a futuro por Kepa Arrizabalaga. Quizá lo segundo gane más enteros.

Ziganda ¿en Segunda B?

A falta de que el filial certifique su descenso, parece realista pensar que Cuco Ziganda no vaya a seguir al frente, por lo que supone regresar a una categoría inferior y la pérdida de potencial de un grupo en el que puntales actuales no seguirán y deberá surtirse de un Baskonia, 15º en Tercera. Un Bilbao Athletic en el que tras esta buena hornada que ascendió a Segunda A se debería empezar desde cero. Además, la relación del navarro con Amorrortu no es la mejor.

Aduriz y De Marcos, ok para aplaudir a Maldini

El equipo descansa hoy y mañana, pero en la sesión de ayer se pudo apreciar cómo Aduriz y De Marcos están recuperados de sus molestias y estarán ante el Celta –frente a el Las Palmas se jugará el 8 de mayo, a las 17.00–. Ambos podrán conocer y asistir a la entrega, en el descanso ante los gallegos en San Mamés, del segundo Premio ‘One Club Man Award’ otorgado por el Athletic y que ha recaído en Paolo Maldini, el gran capitán del Milan (1984-2009), al que ya en 2007, en un amistoso en La Catedral, Iribar le entregó un recuerdo como&flexSpace;«ejemplo de jugador de cantera». El italiano sustituye así al inglés Matt Le Tissier. Pero el protagonista ayer fue el joven Iñigo Lekue, que ha participado en 33 partidos este su primer curso, jugando «más de lo que esperaba». Sobre ese balance, «estoy aprendiendo mucho en este primer año, pero tengo que mejorar en la faceta defensiva, es lo que más me falta. Lo que más se nota es el ritmo de los partidos, que es muy alto. Es a lo que más te tienes que acostumbrar para estar a la altura. Hay veces que estás más contenido, pero siempre intento ser un poco más descarado y tirar hacia adelante aunque las cosas no salgan», reflexionó el jugador, que dijo aprender mucho de De Marcos, su «espejo» en el que mirarse.J.V.