Los nombres que componen las listas de EH Bildu de Araba, Bizkaia, Nafarroa y Gipuzkoa para el Congreso y el Senado español se habían hecho públicos días antes, si bien el acto que la coalición celebró ayer en el edificio de la fundación Orona, en Hernani, sirvió para hacer las presentaciones de forma oficial. Se trata de unas listas muy renovadas con respecto a las que confeccionaron para las elecciones del 20 de diciembre.

Para los comicios del próximo 26 de junio, EH Bildu ha renovado de forma sustancial las caras de sus principales candidatos. Bakartxo Ruiz, cabeza de lista al Congreso por Nafarroa en sustitución de Sabino Cuadra, dijo que los cambios son fruto de «un proceso de renovación interna» acometido después de hacer una «lectura crítica» de los últimos resultados, cuando la coalición logró dos escaños en el Congreso de los Diputados y perdió 4 de los 6 que tenía. A Ruiz le sigue la escritora y periodista Irati Jiménez y Peio Gurbindo, profesor de primaria, exalcalde de Atarrabia y actualmente concejal. El candidato al Senado por este mismo herrialde es Koldo Abrego.

Oskar Matute, actual parlamentario en Gasteiz, es el número uno de la lista de Bizkaia en lugar de Onintza Enbeita, que pasa a ocupar el octavo puesto. La profesora Itziar Abellanal y el abogado y exdiputado de Amaiur Jon Iñarritu van en segundo y tercer lugar, respectivamente.

En Araba, Mikel Otero, un activista contra el fraking, es la cabeza visible, en lugar de Iker Urbina. Le siguen Aitziber Salazar, experta en política internacional y el exalcalde de Laudio Pablo Gorostiaga. Al Senado, este territorio propone a Eba López de Arroyabe, Iker García de Eulate e Izar Mendiguren.

Marian Beitialarrangoitia es la única cabeza de lista que repite, y lo hace por Gipuzkoa. El segundo puesto es para Iñaki Ostolaza, ingeniero, y el tercero es para el portavoz de los trabajadores de Arcelor Mittal de Zumarraga, Aitzol Cajaraville. La propuesta al Senado también ha sufrido cambios. Alberto Unamunzaga, exsenador de Amaiur, estará acompañado por Maite Sarasua y Joanes Rosó.

Se lo toma «muy en serio»

«Tenemos una idea muy clara en estas elecciones: las oportunidades y retos son enormes. ¿Por qué retos? Porque tenemos que mejorar los resultados de diciembre […] y son también una oportunidad porque podemos ampliar la influencia y la fuerza de los soberanistas de izquierdas», consideró Ruiz, apostando que así será.

EH Bildu aseveró que se toma «muy en serio» la próxima cita con las urnas, y cree que la renovación interna es una prueba inequívoca de ello. «No solo en las caras, también de puertas para adentro. Queremos hacer las cosas de otra manera y estamos en ello», garantizó.

Rememorando las palabras pronunciadas la víspera en el Labrit de Iruñea, la representante de la coalición aseguró que «si en Madrid hubiera una mínima posibilidad para el cambio, ahí va a estar EH Bildu», pese a reconocer que «será difícil». «En estos momentos no hay fuerza suficiente para hacerlo, parece que es improbable, aunque en Euskal Herria sí tenemos una mayoría social y política, tenemos condiciones suficientes para que se den esos cambios».

Puso como ejemplo el caso de Nafarroa. «Hace un año emprendimos el camino de un nuevo ciclo que podemos denominar ‘a la navarra’, y que significa haber ganado al régimen en las urnas, haber sido capaces de llegar a acuerdos entre diferentes». Ello posibilitó quitar «la centralidad al PSN», un partido que «no es de fiar».

Beitialarrangoitia destacó la importancia de que la coalición tenga «una presencia fuerte» en Madrid, porque muchas de las cosas que ahí se deciden «tienen una gran incidencia en Euskal Herria».

Tras lamentar que en estos últimos cinco meses ha observado en el Congreso «muchas fotos y titulares, pero poco contenido», afirmó que «el equipo de EH Bildu, vamos a Madrid a trabajar», ta y como ha hecho desde diciembre, tal y como expuso con ejemplos: «desde reclamar unas pensiones dignas, exigir el cierre definitivo y desmantelamiento de Garoña, cerrar las puertas al fracking, defender el sector del acero, hasta la defensa conjunta de las 17 leyes navarras recurridas por el Gobierno español». Su cometido será acordar en Euskal Herria la agenda vasca y defender los intereses de la ciudadanía para «pelearlos» después en Madrid.