Aritz INTXUSTA
IRUÑEA

Gual será acusado por desobediencia si no entrega ya las cuentas de Sanz y Goñi

Jordi Gual, que acaba de convertirse en uno de los banqueros más poderosos del Estado tras sustituir a Isidre Fainé al frente de Caixabank, será acusado de «resistencia y desobediencia» si no entrega el miércoles a la UDEF la información que le reclama de cuentas de Miguel Sanz y Enrique Goñi en la causa que mantiene abierta Kontuz.

El presidente de Caixabank, la primera entidad bancaria del Estado español, será acusado de «resistencia a la autoridad y desobediencia» si no entrega la información que posee de varias cuentas del expresidente navarro Miguel Sanz y del último director de CAN, Enrique Goñi. Así lo ha dispuesto el juez de la Audiencia Nacional, Eloy Velasco, que continúa con la instrucción de la denuncia de Kontuz por la desaparición de Caja Navarra.

La información sobre cuentas de Sanz, Goñi y allegados suyos se solicitó en febrero. Caixabank puso varias pegas para no entregar los documentos solicitados, pero todos los argumentos fueron desmontados después en la réplica que presentaron ante el juez los responsables de la UDEF, considerando, por ejemplo, «incongruente» que no existan varias cuentas bancarias cuya numeración exacta fue trasladada a la policía por parte de la Hacienda Navarra.

Tras medio año de retrasos y excusas, Velasco ya no aguanta más que no se cumplan sus mandamientos. Ahora Caixabank tiene hasta el miércoles a las 13.00 para entregar toda la información. De lo contrario, uno de los banqueros más poderosos del Estado se verá en problemas ya que el auto exige la entrega de la documentación «bajo apercibimiento de ser perseguido por un presunto delito de resistencia y desobediencia a la autoridad». El auto tiene fecha del 20 de julio.

El ultimátum del juez alcanza a Jordi Gual en su estreno como primer ejecutivo de Caixabank, ya que sustituyó a Isidre Fainé a finales de junio. De este modo, Fainé traslada la patata a la nueva dirección después de años de inacción. Porque Caixabank, hasta ahora, no ha tenido el valor de actuar con determinación con los responsables que provocaron la desaparición de CAN.

Más aún, ha premiado a varios de ellos, como el propio Enrique Goñi, con puestos de responsabilidad. Y, además, ha permitido que Goñi continuara haciendo gestos de una prepotencia insultante para con la ciudadanía navarra, como entregar la presidencia de Bodegas Sarría al propio Miguel Sanz.

En concreto, la UDEF está rastreando 73 cuentas bancarias cuya titularidad es de Sanz, Goñi o de personas allegadas. Hay cuentas de Caixabank, Caja Rural, Barclays y de la entidad bancaria francesa Boursuorama. Algunos de los movimientos de los primeros rastreos de información han generado dudas a los agentes, relacionados con compras de fincas.

El caso «caja Navarra» fue abierto por Kontuz. Esta asociación de contribuyentes detalló a la justicia una serie de inversiones realizadas por CAN y Banca Cívica que llamaban la atención, algunas vinculadas a amistades personales de Sanz y Goñi. Entre ellas, se encuentra la inversión en Oesia, una empresa tecnológica en la que la CAN perdió 90 millones de euros. El rastreo de las cuentas se está realizando a instancias del fiscal y la UDEF para comprobar que Goñi y Sanz no recibieran algún tipo de compensación a cambio de estas inversiones.