Joseba ITURRIA
CICLismo

«¿Quieres ir al Porvenir?»

Jokin Etxabe recibió la llamada a 24 horas del inicio y su compañero Alain Ramírez le llevó en coche a Lyon.

Jokin Etxabe (Bergara, 3-2-1994) se entrenaba el día antes de comenzar el Tour del Porvenir con su grupeta cuando recibió la llamada del seleccionador español Pascual Momparler para preguntarle si quería acudir a la prueba en sustitución de Mas.

El ciclista de Bergara explica a GARA que «estaba como reserva y una llamada así no se recibe todos los días. Le dije que sí sin saber cómo ir, pero un compañero con el que estaba en ese momento, Alain Ramírez, me dijo que él me llevaba en coche hasta Lyon y, aunque llegamos tarde, con la ilusión y ganas que tenemos, todo es más fácil».

Ya fue parecida su participación en la Carrera de la Paz en la República Checa en sustitución de Jaume Sureda y antes había corrido con la selección española la Vuelta a Madrid. A pesar de ser un corredor que no ha vencido ninguna carrera como amateur, sus dos triunfos de juvenil los logró al entrar con su hermano gemelo Beñat, se ha ganado la confianza de Pascual Momparler: «Al ser regular ha contado conmigo y soy un privilegiado. He ido siempre a hacerlo lo mejor posible. En las carreras de aquí no destaco, pero el seleccionador acaba satisfecho conmigo porque cumplo lo que dice y él también responde».

Jokin Etxabe fue el 37º entre los 106 que acabaron la mejor vuelta sub’23, con tres etapas alpinas con final en alto de gran dureza: «Más que ese puesto destacaría que fui el quinto o el sexto amateur. No es como para estar muy contento, pero se ve que mi nivel no es tan malo».

«Fui a disfrutar»

Añade que «fui a disfrutar y a hacer lo mejor posible todo lo que me pedía el seleccionador. Es una carrera diferente a lo que estamos acostumbrados y se refleja más la calidad o el nivel. Hay mucho desgaste por la velocidad, se va todo el día muy rápido y en los últimos días hemos subido puertos de 15-17 kilómetros que se hacen largos y, si van acompañados de seis días de competición, más aún».

De su experiencia destaca «las ganas y la ilusión de todos los corredores. Ven su sueño delante de los ojos y la gente le echa más ganas». De los rivales destaca al italiano Ravasi y al estadounidense Arien Costa, segundo y tercero tras Gaudu: «Ven la carrera de otra manera, con más tranquilidad, iban muy fácil».

En las primeras etapas le tocó trabajar para intentar ganar con Iván García Cortina al sprint y en la montaña todos tuvieron libertad para hacer su carrera: «Al final los puertos tan largos ponen a cada uno en su sitio. Los primeros días me costó coger el ritmo de los profesionales, pero con los días he ido a más». Agradeció tener como compañero a otro vasco, Alex Aranburu: «Tuvo un penúltimo día malo en el que levantó el pie, pero se recuperó y el último respondió».

Está agradecido a Momparler y «a todos los que están detrás mío siempre ayudando como Paulo, mi tío, un César Solaun que ha estado doce años de profesional y te aconseja y también destacaría el apoyo del masajista David Etxabarri, que en los momentos más difíciles siempre está ahí para ayudarte».

También valora el trabajo del Lokatza, en el que corrió hasta juveniles tras alternar al inicio ciclismo y atletismo: «En los tres últimos años hemos corrido tres de Bergara el Tour del Porvenir –Lizarralde, Aristi y yo– e Irizar ha corrido con Murias». Él y su hermano gemelo –se distinguen en el pelotón porque Jokin corre con zapatillas azules y Beñat, quinto el domingo en Zegama, con blancas– intentan ampliar el número de profesionales del pueblo y seguir la tradición familiar. Un tío suyo, Miguel Bengoa, fue profesional con el Kas y otro, Mikel Leturia, que destacó en Iberdrola, estuvo cerca de pasar.

«Estoy centrado en acabar bien el año»

Su director Santi Barranco decía a GARA que Jokin Etxabe merece un sitio en Murias y va a ayudar a sus ciclistas a buscar equipo para el próximo año tras la desaparición de Seguros Bilbao. El de Bergara trasmite que «Murias es el equipo de casa y hace ilusión estar ahí, pero no sé si cuentan conmigo. Si no, Santi ayuda todo lo que puede. Algunos equipos aficionados ya están interesados, pero ahora no pienso en eso y prefiero acabar bien la temporada y luego vendrá lo que tenga que venir. Quiero hacer bien las carreras que quedan, disfrutar y, cuando acabe el año, ya veré qué opciones hay».

Dejará de ser sub’23 y tiene claro que seguirá «un año más al menos porque estoy disfrutando de la bicicleta. Con esta vida suelo disfrutar y ahora mismo no tengo en mente dejarla». Lamenta la despedida de Seguros Bilbao: «El ciclismo vasco y el español pasa un mal momento en aficionados y profesionales y con esto va a peor. Por eso quiero acabar bien el ciclo de este equipo sin pensar en el futuro».