Mikel INSAUSTI
CRÍTICA «Cuando tienes 17 años»

La homosexualidad adolescente en el medio rural

Merece la pena recalcar que André Techiné ya hizo una obra maestra sobre la adolescencia con “Los juncos salvajes” (1994), pero entonces empleó para hablar del tema un tono autobiográfico. A sus 73 años se lo ha tenido que pensar un poco más, porque la distancia generacional se vuelve mayor con el paso del tiempo. Ha preferido ser precavido y presentar a chicos del medio rural, porque siempre hay un cierto atraso con respecto al desarrollo urbano, máxime cuando se trata de cuestiones difíciles de aceptar en comunidades cerradas como la homosexualidad. Y, con tal de asegurarse ya del todo, ha pedido ayuda para la escritura del guion a una cineasta más joven como Céline Sciamma, reconocida por sus retratos de menores actuales en “Lirios de agua” (2007), “Tomboy” (2011) y “Girlhood” (2014).

La narración sigue el ciclo estacional, de acuerdo con la cronología de los tres trimestres del curso escolar. La fotografía de Julien Hirsch muestra los cambios de temperatura ambientales, a la vez que los dos jóvenes protagonistas también van viviendo un deshielo paulatino en sus relaciones personales. El paisaje pirenaico resulta ideal para dicha descripción, como en las películas de los hermanos Larrieu. También es muy determinante el entorno familiar, muy diferente para Tom (Corentin Fila) y para Damien (Kacey Mottet Klein). El primero vive en una granja de la montaña, por lo que ha de caminar durante dos horas a primera hora de la mañana para llegar al instituto, mientras que el segundo reside en un cuartel por ser hijo de militar.

Al encontrarse en pleno proceso formativo los dos tienen reacciones encontradas y muy físicas, peleándose de modo instintivo al no poder controlar sus sentimientos. Reniegan de la atracción mutua que ha surgido entre ellos, y será la madre de Damien la mediadora necesaria.