Maitane ALDANONDO
Donostia

EL USO RESPONSABLE DEL MÓVIL COMO MODELO DE NEGOCIO

La aplicación desarrollada por dos jóvenes donostiarras quiere contribuir a evitar el sobreuso de smartphones y tabletas. La versión beta de la herramienta salió al mercado de forma gratuita el pasado setiembre, y como idea ya les ha reportado varios premios.

El sobreuso de los dispositivos móviles provoca cada vez más problemas, sobre todo, entre padres e hijos. De una vivencia de ese tipo surgió la idea que originó StopApp, una startup especializada en el control del tiempo digital. Con una trayectoria de poco más de un año, acaba de sacar al mercado su primera app y está desarrollando otra que responda a los conflictos paterno-filiales derivados del uso de móviles y tabletas.

«Es una discusión que he vivido en casa, por eso creo en el proyecto. Es un problema que existe y cada vez es mayor», recuerda Miguel López de Ceballos socio de la iniciativa junto a Alex Adrada y Dario Mazzela. El joven donostiarra estaba trabajando en Italia gracias a una beca Global Training organizando un evento sobre startups cuando su padre le dio la idea: necesitaba una aplicación con la que limitar el uso del móvil de su hermana. La compartió con su jefe, Mazzella, a quien le pareció que tenía posibilidades. Necesitaban un diseñador, por lo que sumaron al equipo a Adrada, primo de López de Ceballos. En verano de 2015 presentaron la iniciativa al concurso Crea Summer Academy organizado por la Comisión Europea en Tallin (Estonia) y resultaron ganadores. Recibieron fondos, pero sobre todo les sirvió para construir StopApp.

Poco después, ya en Donostia, se inscribieron en el Programa Yuzz organizado por el Banco Santander y coordinado en Gipuzkoa por Fomento de San Sebastián. Ganaron el concurso local por lo que en octubre viajaron a Silicon Valley con el resto de galardonados. Además de conocer el ecosistema emprendedor visitando Facebook, Google o LinkedIn, han podido presentar su app a varios inversores. Junto con los consejos de estos empresarios, López de Ceballos se ha traído algunas lecciones: «Para tener éxito allí necesitas haber fracasado antes; si no nadie confía en tí. Si no has fracasado tus objetivos no eran suficientemente ambiciosos. También he aprendido que de cualquier situación puede surgir una oportunidad».

Los premios obtenidos junto con la ayuda al emprendizaje, tanto formativa como económica, de Fomento de San Sebastián, Bic Gipuzkoa o el Gobierno Vasco han hecho posible la primera versión de la aplicación. «En cuanto a ayudas Euskadi está muy bien. Hemos hablado con compañeros en San Francisco y alucinan con cómo nos han ayudado», afirma el responsable.

Aprender jugando

El primer producto que han creado se centra en la productividad laboral y está dirigido a profesionales. Ofrece estadísticas del tiempo que el usuario pasa a lo largo del día en cada aplicación y le permite bloquearlas durante una franja horaria. Si intenta acceder a ellas no podrá. Es una versión beta que de momento está disponible solo para Android. El pasado 26 de setiembre salió al mercado y ya tiene 2.000 usuarios. Es gratuita, «siempre lo será», e irán completándola con más características y funcionalidades.

Uno de los objetivos que persiguen con esta versión de prueba es ver qué les piden los usuarios. Por ahora han constatado que la necesidad es real y han recibido cerca de 60 solicitudes de la aplicación que están desarrollando: StopApp Padres. «Es nuestro producto estrella. Con él vamos a lograr ayudar a los padres a enseñar a sus hijos de manera divertida cómo no sobreutilizar el móvil», explica el emprendedor. El usuario puede controlar cuánto tiempo se utilizan los móviles y las tabletas vinculadas desde su propio dispositivo y limitar una aplicación en una franja horaria concreta o pactar el número de horas de uso. Puede ver qué aplicaciones se utilizan, pero no el contenido o qué se hace en ellas. Por su parte los hijos verán un juego. «Seleccionarán un avatar con el que competir con sus amigos que crecerá y se hará más fuerte a medida que usen menos el dispositivo. Además el padre irá comprando monedas –2-3 euros al mes– mediante las cuales poner límites a sus hijos y que les permitirá acceder a premios, sorteos… Son incentivos para que reducir el uso».

Aspiran a ser un referente en el uso responsable de la tecnología, ofreciendo servicios más allá de la aplicación. Para avanzar en ese camino, están buscando un desarrollador con experiencia que quiera ser socio, e invitan a los interesados a ponerse en contacto con ellos. El proceso está siendo más lento de lo esperado, y de momento, López de Ceballos es el único que se dedica en exclusiva a la iniciativa. Obtienen ingresos por publicidad, pero son muy escasos, por lo que requieren inversores. Están a la espera de la respuesta de una de aceleradora de empresas y dependiendo de la cantidad que perciban optarán por dirigirse al mercado global –necesitarían cerca de 150.000 euros– o a un mercado segmentado.