Iñaki IRIONDO
GASTEIZ

Ertzainas testigos en el caso Cabacas no recuerdan, no vieron, no saben

¿Testigos con «síndrome de infanta»? No recuerdo nada, no vi nada, no escuché nada. Ese puede ser el resumen de la declaración de dos ertzainas que la noche de la muerte de Iñigo Cabacas estaban de paisano en el lugar de los hechos, que ayer declararon ante la jueza Ana Torres y que respondieron con estas evasivas a los letrados de la familia y de un mando acusado. Ni siquiera se acuerdan de si había furgonetas policiales a 50 metros de donde estaban.

La acusación particular en nombre de la familia Cabacas y otro abogado con interés en el esclarecimiento de los hechos en los que un pelotazo de la Ertzaintza mató a Iñigo Cabacas, no salían ayer de su asombro al ver que los ertzainas testigos citados ante la jueza Ana Torres aseguraban no acordarse de lo que ocurrió en una noche que, según diversos testimonios, ha marcado a todo el cuerpo.

A pesar del paso de muchos años, la gente suele recordar dónde estaba cuando se enteró de que habían matado a JFK, o el 23-F de 1981 a las seis de la tarde, o cuando dos aviones se estrellaron contra las Torres Gemelas (¿veía todo el mundo a Matías Prats en A3?)... En el plano personal, la maquinaria de la memoria de los detalles ligados a fechas grabadas en el calendario personal es increíblemente precisa.

Y, sin embargo, los agentes de paisano (askatus) 8.072 y 9.185, con el identificativo de patrulla Alfa 41, que según las grabaciones internas de las comunicaciones de aquella noche, a la hora en la que se produjo el pelotazo que mató a Iñigo Cabacas estaban de ronda (korrika) por las inmediaciones de la comisaría de María Díaz de Haro 2, a cincuenta metros del callejón donde recibió el pelotazo el joven, ni recuerdan ni vieron ni escucharon nada. Por lo sabido de su declaración de ayer, ni siquiera se acuerdan de que hubiera allí un despliegue de furgonetas de la Ertzaintza.

La fiscal no pregunta

Según ha sabido este diario, la fiscal del caso tampoco efectuó ninguna pregunta durante la declaración de ayer de estos agentes. La jueza del caso también estuvo silente ante la falta de memoria de los testigos.

Antes de entrar en el juzgado, la abogada de la acusación de la familia, Jone Goirizelaia, ya repitió su estupefacción por la actitud que mantiene el ministerio público. «Lo que hemos visto –declaró– es que ha tenido un papel totalmente pasivo. No ha solicitado la práctica de ninguna prueba. Cuando nosotros hemos pedido pruebas, se ha posicionado en contra, ha recurrido absolutamente todas las cosas que hemos planteado y, la verdad, es que estamos bastante sorprendidos por el papel que ha tenido porque no ha sido de impulso a la instrucción, sino todo lo contrario».

Las declaraciones de los testigos, por su falta de memoria, fueron breves. Al final, algunos de los asistentes no pudieron evitar comentarios sarcásticos. Las alusiones a la infanta Cristina se hicieron explícitas.

Manu Cabacas: «Justicia, la verdad la saben todos»

Con motivo de esta declaración como testigos de dos ertzainas, la plataforma 'Iñigo Gogoan' convocó ayer una concentración ante el Juzgado, en la que participaron los padres de Iñigo, Manu Cabacas y Fina Lizeranzu, la abogada Jone Goirizelaia, y la secretaria general de LAB, Ainhoa Etxaide, y concejales de EH Bildu de Bilbo.

Manu Cabacas declaró que están «desolados» por cómo se está llevando la instrucción en este caso puesto que «siempre te queda un atisbo de esperanza», pero «no ha sido así» después de que la Audiencia Provincial de Bizkaia rechazara finalmente imputar a 'Ugarteko' con el argumento de que sería «juzgar lo absurdo». En opinión de la familia Cabacas, «lo absurdo es que haya fiscales y jueces así. Es una vergüenza porque eso no es hacer justicia». «Lo de Iñigo se tiene que esclarecer porque nos podrán quitar la justicia, pero la verdad la conoce todo el mundo», afirmó su padre.GARA