La Mesa Sectorial entre los sindicatos y la dirección de Osakidetza reunida ayer en Gasteiz supuso el primer acercamiento después de ocho meses sin que ambas partes se encontraran alrededor de una misma mesa. La aproximación, no obstante, fue solo física, a tenor de las valoraciones que hicieron a los medios las partes implicadas al término de la reunión.

El director general de RRHH del servicio de Salud, José María Armentia, afirmó haber planteado un «pacto por la estabilidad del empleo» y varios compromisos, como llevar a cabo una nueva OPE y solicitar al Gobierno de Madrid la eliminación de la tasa de reposición para convocar el «mayor número de plazas posible». Respecto a la eventualidad, la dirección planteó un «nuevo enfoque» que pasaría por impulsar las sustituciones y dar prioridad a la interinidad frente a otro tipo de relaciones laborales.

Según detalló, en la oferta lanzada a las centrales se incluye la negociación de las bases reguladoras de la convocatoria de un concurso de traslados de 939 plazas y de una nueva OPE.

En cuanto a las condiciones de trabajo, el Departamento de Salud quiere alcanzar un nuevo acuerdo que sustituya al anterior. Para ello, ofertó la creación de una comisión con las centrales sindicales para aprobar una metodología y un calendario de negociación.

A los sindicatos, Armentia les solicitó que «hagan un ejercicio de responsabilidad», y estos, a su vez, «hechos» en lugar de palabras.

Una negociación real

Escepticismo fue lo que trasladaron los sindicatos Satse, ELA, LAB, SME, FFHE, CCOO, UGT y ESK desde el otro lado de la pancarta. Pese a las medidas sugeridas, ELA echó en falta «propuestas concretas» al considerar que se trata de «los mismos temas planteados en los últimos cuatro años». Peio Igeregi hizo referencia a la «excesiva contratación temporal» en Osakidetza. «La dirección ha reiterado que cumplirá la legislación impuesta desde Madrid», porque la normativa «permite mantener porcentajes superiores al 40% en la contratación temporal», declaró, y animó a continuar con las movilizaciones.

LAB llevó a la cita una propuesta de «negociación real» basada en cinco puntos y que ya fue facilitada a Osakidetza en la anterior legislatura: un nuevo acuerdo de condiciones laborales, un Plan de Empleo, un nuevo acuerdo de contratación, respeto al euskera y el fin de las privatizaciones.

Este sindicato admitió que el borrador de Armentia «recoge algunos» de estos puntos, como la convocatoria de nuevas OPE y el cambio de formato de estas convocatorias; un nuevo acuerdo de contratación y un nuevo acuerdo de condiciones laborales, pero lamentó que obvia la situación del euskera y las privatizaciones.Precisamente, combatirlas será «una línea roja» en la negociación, según adelantaron.

Mesas sectoriales específicas

No haber dejado atrás «los malos hábitos» fue el reproche de CCOO. En un comunicado, explicó que la dirección le trasladó ayer un extenso documento sobre negociación colectiva del que «no había conocimiento hasta ahora» y que retomaba temas como la estabilidad en el empleo, la contratación, los traslados o las OPE, que son «de suficiente calado como para requerir una mesa sectorial para cada uno de ellos».

«Esto sólo demuestra que Osakidetza dejó todo el trabajo sin hacer en la legislatura anterior», agregó. El sindicato exigió al Departamento de Salud «un cambio de actitud» en la negociación, «sin olvidar la mochila que arrastra ahora por las sentencias» que CCOO ha ganado en los últimos años, como las relativas al segundo Plan de Euskera o a las Organizaciones Sanitarias Integradas (OSI).