Entre la ilusión, como sostiene tras su derrota en el Villamarín José Luis Mendilibar que es la aspiración del Eibar por meterse en puestos europeos, y la obligación que supone en el caso del Athletic. Ambos objetivos se cruzan el lunes y si bien una victoria de los armeros, incluso un empate, dejaría las cosas con el mismo suspense que una película del maestro Alfred Hitchock, un triunfo visitante allanaría las cosas a los rojiblancos y dejaría ‘desilusionados’ a los guipuzcoanos. Todo o buena parte del futuro de ambos pasa por Ipurua. Como también por lo que den de sí el resto de aspirantes, en cuya puja se ha colado aprovechando el desinfle de Alavés y Celta, un Espanyol que en San Mamés pareció un equipo sin alma pero el cual, a la chita callando, está a solo cuatro puntos de los bilbainos. Cinco equipos para tres plazas, siempre que la séptima dé opción a puesto europeo.

Los rojiblancos iniciaron ayer tarde en Lezama su cuenta atrás para la visita al conjunto armero. Con pleno de efectivos y con más de una semana de recuperación, el Athletic afronta el partido con ese saber de que estos tres puntos en litigio pueden resultar determinantes si se los trae de vuelta en el autobús a Bilbo. Sería apuntillar a los eibartarras y esperar a que algún otro competidor pinche, quién sabe si caso del Espanyol que recibe al Atlético. No hay que olvidar que en la jornada intersemanal, el Athletic recibe a un Betis ya salvado y que la Real visita Mestalla y el Villarreal acude al Calderón. Si los de Ernesto Valverde logran hacer pleno en estos dos partidos y el resto cede por el camino, a falta de cuatro encuentros los leones estarían en una inmejorable posición para el round final.

Mucho en juego y mucho por jugar, que hace del de Ipurua un duelo clave para los intereses de los bilbainos. Y es que a estas alturas, y vista no solo la solvencia en casa sino la determinación con la que los jugadores están afrontando estos duelos, nadie piensa que los seis puntos que restan por jugar en San Mamés, ante Betis y Leganés, se vayan a dejar escapar. Así que todo apunta a que las habas se van a jugar lejos de su feudo. Eibar está marcado en rojo y puede resultar determinante.

El Athletic suma dos empates y dos victorias en sus cinco comparecencias en Ipurua, dos en competición liguera y otras tres en la Copa. La única derrota rojiblanca allí fue en el último encuentro, el 30 de agosto de 2015, cuando el conjunto local venció por 2-0 en un mal partido de los leones. Un año antes, en el estreno del equipo armero en la máxima categoría, el Athletic ganó por 0-1 gracias a un tanto de Carlos Gurpegui.

Los otros tres enfrentamientos entre ambos conjuntos fueron en la Copa y en los dos primeros los guipuzcoanos militaban en el Grupo 3 de Tercera División. En la temporada 1979-80, ida de la primera ronda, el Athletic venció por 2-5 (Dani 2, Goikoetxea, Irureta y Sarabia) y en la 1984-85, segunda eliminatoria, el partido acabó en empate a uno (Endika).

El último encuentro copero entre Eibar y Athletic fue hace algo más de cuatro años y acabó sin goles. Sin embargo, el equipo dirigido por Gaizka Garitano, entonces en Segunda B, acabó eliminando al de Marcelo Bielsa tras empatar a uno en la vuelta disputada en San Mamés.

Duelos aéreos en Ipurua

Este Eibar de Mendibilibar es cosa mucha más seria, a pesar de ese tropezón en campo bético esta jornada. Es verdad que tendrá bajas sustanciales en el eje de la zaga, pero en su campo le hace difíciles los partidos a cualquiera. Habrá que ver cuál es la apuesta de Txingurri en el once, si vuelve Beñat a la medular en un choque que se presume físico y de pocos espacios, o si repite con San José e Iturraspe. Incluso si la pareja Williams y Muniain ocupa las alas o tiene cabida el ‘potrillo’ Lekue.

Lo que es evidente es que los leones se miden a un rival que aprieta mucho, que no duda para nada en jugar en largo por lo que la presión alta de los bilbainos no será tan fundamental, y en donde ganar las segundas jugadas será clave. Duelos para gente como San José o los centrales rojiblancos, también para los laterales, sobre todo en el caso de Balenziaga y quien le acompañe por delante, para frenar a ese dúo Capa-Pedro León, que suman más centros al área que equipos al completo como Celta o Las Palmas.

Un partido, un derbi que puede valer más de tres puntos por lo que de valor tendrá cara a la recta final de la liga, sobre todo si es el Athletic el que se lleva el gato al agua. Se dejó pasar la oportunidad en Villarreal, hacerlo en Ipurua sería tentar demasiado a la fe en sí mismo.

Desplazamientos a Vigo para apoyar al equipo

Eibar, Betis y, para finalizar, la semana desplazamiento a Vigo. Una fecha señalada por la afición no solo por lo que hay en juego sino porque a falta del Rayo, la celtiña es de las que mejor recibe y confraterniza con la rojiblanca. Así, la Agrupación de Peñas ha programado un viaje de dos noches, para peñistas y no peñistas –entre 100 y 180 euros–, con fecha tope para apuntarse el día 21. También la ICHH ha programado el suyo propio, ida y vuelta el mismo día –de 30 a 50 euros–, apuntarse en Kirruli.J.V.