Una furgoneta blanca serpenteando a gran velocidad desde la Plaza de Catalunya, al inicio de Las Ramblas, por la acera central de esta avenida de Barcelona provocó al menos trece de muertos y decenas de heridos entre escenas de pánico de las personas que se encontraban en el lugar poco después de las 17.00.

El conductor del vehículo lo abandonó a la altura del mosaico de Joan Miró y huyó a pie, sin que hubiera evidencias de que estuviera armado, según los Mossos d’Esquadra.

El president de la Generalitat, Carles Puigdemont, confirmó que 13 personas murieron en el atentado y que había al menos 80 heridos ingresados en distintos hospitales, 15 de ellos en estado grave.

Puigdemont ofreció estos datos en una declaración institucional en el Palau de la Generalitat –acompañado del vicepre- sidente, Oriol Junqueras, y de la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau– después de presidir un gabinete de crisis.

Más tarde, el conseller de Interior, Joaquin Forn, elevó el número de heridos a más de un centenar, ya que algunos se habían trasladado por sus propios medios a los hospitales. Además, no descartó que aumentara la cifra de fallecidos dado el estado de los heridos, y destacó la dificultad de la identificación de las víctimas ya que no todas iban documentadas.

El president calificó el ataque cono un atentado «de dimensiones muy graves» que ha conmocionado al mundo entero.

Muchas de las personas que paseaban por Las Ramblas se refugiaron en hoteles y comercios hasta que poco después empezaron a ser evacuadas por los Mossos de Esquadra. Con todo, las autoridades no preveían trasladar a todas ellas antes de la medianoche.

El centro de Barcelona quedó prácticamente aislado, ya que las líneas del metro no hacían parada en Plaça Catalunya, Liceu y Drassanes, Paral·lel y Paseo de Gràcia, y los autobuses también dejaron de circular por la zona.

Por toda Barcelona se instalaron controles policiales. En uno de ellos, situado en la avenida Diagonal, un sospechoso se saltó el dispositivo policial y, según los Mossos de Esquadra, embistió contra los agentes hacia las 19.45. Los policías dispararon contra el vehículo, que continuó circulando y fue interceptado a tres kilómetros del lugar, en Sant Jus Desevern.

El sospechoso, al que fuentes policiales relacionaron en un primer momento con el atentado, fue hallado muerto. Horas después, sin embargo, negaron esta vinculación. Los Mossos d'Esquadra activaron a los artificieros del Tedax para inspeccionar el vehículo.

Reivindicación

Poco después del atentado, el Estado Islámico (ISIS), a través de su agencia de noticias Amaq, asumió el ataque y lo justificó como una respuesta a los llamamientos previos para atacar a «países de la coalición», un argumento similar al que ha esgrimido en otros atentados recientes en suelo europeo.

Las autoridades confirmaron la detención de dos personas en Ripoll (Girona) y Alcanar (Tarragona). En un primer momento llegaron a difundir el nombre y fotografía de uno de los detenidos, pero poco después una persona con esa identidad se presentó ante la Policía denun- ciando el robo de su documentación.

El major de los Mossos, Josep Lluís Trapero, confirmó la detención de dos personas «directamente implicadas con el atentado», pero señaló que ninguna de ellas era el conductor de la furgoneta. «Eso no significa que no pueda haber otras personas que hayan podido colaborar en otros aspectos del atentado, como en su preparación», añadió.

Explicó que en el momento del ataque había mucha Policía cerca, pero no se pudo frenar antes al vehículo por «la gran cantidad» de cuerpos que iba dejando por el camino.

Trapero apuntó que la investigación conecta el atentado en Barcelona con una explosión que se produjo en la noche del miércoles en una casa en Alcanar por una acumulación de gases, que vinculó a la preparación de explosivos, en la que hubo un muerto y tres heridos.

Así, los detenidos serían una persona relacionado directamente con la explosión de Alcanar y de origen español, y otra, de origen marroquí, vinculada con la furgoneta que embistió a los viandantes en Las Ramblas.

No había sido detenido el conductor de la misma, aunque Trapero descartó que haya riesgo de más atentados.

Segunda furgoneta

Por otra parte, una segunda furgoneta que la Policía relacionó con la utilizada en el atentado fue localizada en Vic. Se trataba de un vehículo de alquiler y fue recogido en la localidad barcelonesa de Santa Perpètua de la Mogoda.

Pasadas las 22.00 el centro de Barcelona se encontraba casi desierto, con los turistas encerrados en sus hoteles y las calles de los alrededores de Plaça Catalunya ocupadas solo por furgones y coches de la Policía autonómica.

Solo algunos turistas deambulaban por la zona esperando para recibir la autorización definitiva de la Policía para poder acceder a sus hoteles.

A esa hora todavía seguían afectadas las líneas 1, 2, 3 y 4 del metro, y permanecían cerradas las estaciones de Plaça Catalunya y Passeig de Gràcia de Renfe, y la de Plaça Catalunya de Ferrocarrils de la Generalitat.

Tres días de duelo

La Generalitat decretó tres días de duelo y anunció que quedaban suspendidos todos los acto lúdicos programados en los municipios catalanes.

En la declaración institucional en el Palau de la Generalitat, Puigdemont subrayó que «Catalunya ha sido, es y será tierra de paz y bienvenida», y que no dejarán «que una minoría acabe» con la manera de ser de sus ciudadanos forjada a lo largo de los siglos. «Los catalanes hemos sido, somos y seremos gente de paz y acogida», insistió el president, que añadió que « entre todos y todas las instituciones, doblegaremos a los que intentan confrontar civilizaciones con el uso de la violencia».

Entre las reacciones internacionales, el secretario general de la ONU, António Guterres declaró que «Naciones Unidas se solidariza con el Gobierno de España en su lucha contra el terrorismo y el extremismo violento». El presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, expresó su «profunda tristeza y angustia» ante este «cobarde ataque, y el presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk, afirmó que «toda Europa está con Barcelona. Nuestros pensamientos están con las víctimas y con todos los afectados por este cobarde atentado».

El presidente francés, Emmanuel Macron, subrayó la solidaridad de su país con las víctimas del «trágico ataque en Barcelona». «Mis pensamientos están con las víctimas del terrible ataque de hoy en Barcelona y con los servicios de emergencia que están respondiendo a este incidente», afirmó la primera ministra británica, Theresa May, quien recalcó que «el Reino Unido respalda a España contra el terror».

En la misma línea, el Gobierno alemán expresó su dolor y solidaridad con las víctimas del «abominable» atentado, mientras Austria condenó este «acto brutal de terrorismo contra gente inocente». «#Barcelona espléndida y amiga está bajo ataque. Italia cercana a las autoridades locales y españolas. Pensamiento próximo a las personas afectadas», escribió en Twitter el jefe del Gobierno italiano, Paolo Gentiloni.

«Los terroristas no vencerán nunca a un pueblo unido que ama la libertad frente a la barbarie», señaló el presidente del Gobierno español, Mariano Rajoy. Asimismo, los alcaldes de ciudades golpeadas por el atentados yihadistas como la primera edil de la capital francesa, Anne Hidalgo, o el regidor de Londres, Sadiq Khan, reaccionaron de inmediato.

Tuit islamófobo de Trump

El presidente de EEUU, Donald Trump transmitió un mensaje de apoyo a través de Twitter. «Estados Unidos condena el ataque terrorista en Barcelona, España, y haremos lo que sea necesario para ayudar. ¡Sed duros y fuertes, os queremos!».

Pero poco después, añadió otro mensaje de tintes islamófobos y basados en una «leyenda bélica» en plena polémica por su «comprensión» hacia los grupos racistas. Trump puso como ejemplo de lucha contra «el terrorismo radical islámico» una historia que atribuye al general estadounidense John Pershing mojar balas en sangre de cerdo antes de ejecutar a insurgentes musulmanes en Filipinas hace más de un siglo. «Estudien lo que el general Pershing de EEUU hizo a los terroristas cuando fueron capturados. ¡No hubo más terrorismo radical islámico durante 35 años!», dijo Trump.

Se refería así a una supuesta acción de Pershing según la cual, antes de ejecutar a 49 insurgentes musulmanes filipinos, ordenó empapar las balas en sangre de cerdo. A otro de ellos, según ese relato, le urgió a que regresase y contase al grupo insurgente lo ocurrido. Los hechos atribuidos a Pershing, que se dice ocurrieron en la provincia de Moro, de mayoría musulmana, poco después de la Guerra Hispano-Estadounidense, no cuentan con evidencia histórica pero Trump ya los utilizó durante su campaña electoral.

Urkullu ofrece la Ertzaintza y Otegi suspende el acto de hoy

Los mensajes de solidaridad con las víctimas del atentado de Barcelona de los representantes políticos vascos fueron inmediatos y vinieron acompañados de actitudes y acciones acordes a sus postulados.

El lehendakari, Iñigo Urkullu, transmitió sus condolencias tanto al president de la Generalitat, Carles Puigdemont, como al presidente español, Mariano Rajoy, y deseó el «pronto restablecimiento» de las personas heridas y se solidarizó con «el dolor de todas las personas y familiares». Ofreció, al tiempo, la colaboración de la Ertzaintza, que recordó que «estamos en alerta 4», tanto con los Mossos como con las FSE «si fuera necesario».

Además de trasladar su solidaridad a las víctimas, familias y al «pueblo de Barcelona y Cataluña», el Ejecutivo navarro reiteró su compromiso «en trabajar en una sociedad en paz, basada en el respeto de los derechos humanos y en la convivencia entre diferentes». Realizó también, un llamamiento a la ciudadanía a participar en la concentración convocada a mediodía ante la fachada del Palacio de Nafarroa.

La Mesa y Junta de Portavoces del Parlamento, por su parte, se reunirá hoy de forma extraordinaria para aprobar una declaración de condena, mientras que en la CAV, la Cámara emitió un comunicado reafirmando «nuestra apuesta por la defensa de todos los derechos humanos, sin excepción, y nuestro compromiso con la libertad». Trasladó, además, su «solidaridad y cariño, en tan duros momentos» a las víctimas, a sus familiares y a sus allegados.

Conocido el ataque en Barcelona, el portavoz de EH Bildu, Arnaldo Otegi, anunció la suspensión de la comparecencia prevista para hoy, precisamente para presentar la movilización para Aste Nagusia de Bilbo, al igual que la realizada en Donostia, en defensa del pueblo catalán y de la democracia.

Otegi trasmitió su solidaridad con las víctimas. «Noticias muy preocupantes desde Barcelona. Prudencia y solidaridad con las víctimas de este ataque y con el conjunto de los Països Catalans», escribió en Twitter.

«Estamos consternados por la salvaje agresión contra Catalunya y la ciudadanía de Barcelona», expresó en un mensaje posterior el portavoz de EH Bildu. «El miedo no puede ganar. Sempre amb Catalunya; avui mes que mai», subrayó, después de transmitir «nuestra solidaridad más absoluta y todo el calor humano posible y condolencias a todas las víctimas».

En un extenso comunicado, la dirección del PNV condenó «la acción terrorista, indiscriminada y despiadada», subrayó que el «peso de la ley debe caer sobre quienes están dispuestos a asesinar y matar a sus semejantes» e instó a las autoridades europeas a «reforzar las tareas de Inteligencia con las que investigan a estos grupos y personas violentas». Pidió, a renglón seguido, «no caer en la tentación de señalar o estigmatizar a colectivos, que lejos de ser culpables de esta barbarie, figuran entre los principales damnificados de esta sinrazón».

La secretaria general del PSE, Idoia Mendia, contrapuso en un comunicado de prensa «la vocación acogedora de ideas, culturas y personas» de la capital catalana «con la estrechez de miras de los que tratan de imponer su visión del mundo» y reiteró su «más firme compromiso en la defensa de las libertades y los derechos humanos».

Desde el PP, su secretaria general en la CAV, Amaya Fernández, instó a las formaciones vascas a mantener «un discurso firme contra el terrorismo, sea del signo que sea».

El impacto del ataque en Barcelona llegó también a la Aste Nagusia de Donostia, donde ayer se guardó un minuto de silencio antes de los fuegos artificiales. Asimismo, en las redes sociales se hizo un llamamiento a encender las linternas de los teléfonos móviles.GARA