Joseba VIVANCO
Athletic

Aprobar lo macro, debatir lo micro

El debate sobre la participación e incontables asuntos «menores» eclipsaron las grandes cuentas y números de la Asamblea General.

Un Ayuntamiento es grande en las cosas pequeñas. Es una frase que debiera estar escrita en el frontispicio de cada casa consistorial. Como también de un club de fútbol, sobre todo en el Athletic, «herritik sortu zinelako maite zaitu herriak». Ayer, en la Asamblea General en el Euskalduna se habló de grandes números, de cuentas, de ingresos e inversiones, pero igualmente de inquietudes a pie de calle, de socio. «Porque es la única oportunidad al año de poder preguntar», como vino a quejarse un compromisario desde la tribuna. Y así, la Junta Directiva tuvo que lidiar, y sudar, antes de la aprobación de los números con un rosario de cuestiones, más o menos nimias, más o menos trascendentes, pero para cada cual importantes de darles voz.

Al final, que a fin de cuentas era lo que importaba, los presupuestos estaba previsto que se aprobaran al cierre de esta edición, el del curso pasado y el del vigente. Pero si Josu Urrutia y sus directivos pensaban que iba a ser una alfombra roja, no fueron pocas las veces que tuvieron que reivindicar que «tomamos decisiones que nos hace ser un club diferente, pero si nos fijamos en cosas muy concretas para decir que no lo somos...». Que ante el cuestionamiento de unos cuantos socios compromisarios de temas y asuntos ‘menores’, tuvieron que llamar la atención sobre las grandes cifras y las decisiones de ‘calado’.

Porque no se habló mucho de esas cifras millonarias de las cuentas y presupuesto, más allá de la didáctica exposición del contador Alberto Uribe-Etxeberria al que siempre se agradece su claridad, sino más bien de las pequeñas preocupaciones de cada día del socio, pero, también y mucho, de la participación y el papel de una Asamblea que parece más un convidado que un órgano de decisión. Por ahí fueron algunas de las críticas lanzadas a la Junta Directiva, denunciando incluso que se «usurpa» las funciones a la Asamblea y que se traen propuestas, ya sean inversiones o sean proyectos, a hechos consumados o decididos ya de antemano cómo y por cuánto dinero por la dirección de Ibaigane. Mucho se habló de este asunto nada baladí.

En ese sentido algunos hicieron hincapié en que se deje votar las cuentas incluso antes de que se presenten y se delibere sobre las mismas. Pero esa necesidad de «enriquecer la participación» vino, sobre todo, marcada por la plataforma Athletic Denontzat, la cual consiguió incluir un punto a debate en el orden del día, dirigido a favorecer «mayor participación y transparencia». Aclararon que «no estamos aquí para hacer daño al presidente» ni ir contra la Directiva, sino que defiende una mayor apertura y debates más ricos. «Actualmente los socios solo votan lo que se les propone, porque las sugerencias de los socios ni se discuten ni votan».

Esta plataforma avalada por 156 firmas de socios compromisarios propuso que se puedan debatir y votar «proposiciones de las socias y socios que hubiesen sido presentadas por escrito y con cinco días de antelación al de la celebración de la Asamblea, siempre que vayan firmadas por el 10% de los miembros de la Asamblea o el 2% de los socios y las socias con derecho a voto». Es la tercera ocasión que en una Asamblea en la historia del club se consigue incluir un punto en el orden del día que parta de la masa social y no de la Directiva. «Es una cuestión de voluntad», le emplazó su portavoz de la tribuna, sabedor de la opinión de los dirigentes.

Desde un primer momento quedó claro que la Junta de Josu Urrutia no estaba por la labor, entendiendo, en palabras del secretario Javier Aldazabal, que se trataba de «una lectura hiperlaxa» de los reglamentos. Él mismo se encargó de argumentar la respuesta, aunque Urrutia matizó que «no hay solo una manera de interpretar la participación». Lo que no compartió «es el cómo, la forma de participar, porque para ello hay unos estatutos que lo regulan y una Junta que los interpreta. La única manera de mejorar la participación es la modificación de los estatutos. Dos veces votó a favor la Asamblea de ello y dos veces echó para atrás el borrador. Lo que no podemos hacer es un corta-pega con prisas, sino hacer las cosas bien, porque nosotros interpretamos vuestra propuesta de otra manera».

«Esta Junta está de acuerdo en casi todo lo expuesto, excepto en la forma. Porque cada cual tenemos una idea de lo que es participar», ahondó Aldazabal. «Hoy se discute si lo podemos hacer con los estatutos que tenemos y se trata de interpretar. Y eso no es libre, está reglado». Así que hasta que haya nuevos estatutos, nada de nada de un sistema de propuestas a través de la web del club en lugar de escrito y en persona como ahora.

A la hora del cierre de esta edición se seguía debatiendo sobre esta propuesta rechazada por la Junta de facilitar la aportación y participación de la masa social del Athletic vía las nuevas redes sociales, en lugar de estar «mendigando y pidiendo firmas por bares y esquinas». El hecho es que este debate, como la anterior presencia de un buen número de socios intervinientes, demoraron la votación no solo de este punto sino también de esas grandes cuentas que la Junta de Urrutia presentaba.

Urrutia invita a «no ser cortoplacistas» y hacer las cosas «a nuestra manera»

«No seamos cortoplacistas», fue uno de los mensajes de Josu Urrutia en su habitual discurso de apertura de la Asamblea, en el que volvió a apelar, clásico en él, a los valores, aunque esta vez invitando a viajar en el tiempo a algún momento significativo en que cada cual se fidelizó con el Athletic. A partir de esa mirada, «chequear nuestros pensamientos», regresar al momento actual y en esa singladura, aprovechó el de Lekeitio para pedir comprensión e identificación con el proceder de esta Junta en el día a día. Y ahí, su alocución dejó entrever una justificación a ese cuestionamiento a hechos concretos como la ausencia de fichajes o el alargamiento en la renovación de Kepa. «Buscamos el bien común del club para el presente y el futuro», defendió, aludiendo incluso a que «se nos achaca cierta cabezonería, cuando nosotros los llamamos coherencia, convencimiento y tenacidad». Y es que remarcó aquello de hacer las cosas «a nuestra manera» y no como el resto de clubes, sin que los criterios económicos y deportivos sean los únicos que se tienen en cuenta. Urrutia alertó sobre la «sociedad de la distracción» que no «de la información», e instó a «no ser meros consumidores de datos, pretendidas informaciones y opiniones ajenas», incluso a no «fomentar debates estériles». El presidente concluyó su intervención recordando que «fuera hay admiración y envidia», apelando al final a toda la familia athleticzale a «defender en casa y defender la casa».J.V.