La sin lugar a dudas más animosa grada de los equipos vascos de Primera sigue sin ver esta temporada a su equipo llevarse los tres puntos en casa, a pesar de desgañitarse y no cejar ni un segundo en su apoyo a sus colores, como lo demostró de nuevo en el derbi del sábado. Y ni por esas. El fortín que estaba y está llamado a ser Mendizorrotza, como reclamaba la semana pasada su capitán Manu García, lo tiene todo para que los jugadores respondan con una alegría, pero ni aun así. Cuatro partidos en Gasteiz y cuatro derrotas.

Solo hay cinco precedentes en toda la historia de la Liga en la que un equipo haya tenido un arranque tan desalentador. El último fue el Levante, en la no lejana 2014-15, el anterior el Málaga en la campaña 2010-11 e incluso la Real Sociedad, verdugo de los babazorros, en la 2006-07. Luego hay que remontarse a la 1997-98 y a la prehistórica 1952-53. Cuatro derrotas consecutivas en su propio feudo que hay que conjurarse que no sean cinco con la visita dentro de dos semanas del Valencia. «El equipo está trabajando, nos desconcetramos cinco minutos y fue fatal», fue el resumen del central Maripán sobre la derrota ante los donostiarras. El plantel regresa hoy a los entrenamientos para preparar la visita al complicado Benito Villamarín.

Por otro lado, tanto CD Vitoria como Racing de Santander han condenado la batalla campal entre seguidores de distintos clubes sucedido el sábado en el barrio gasteiztarra de Adurtza, en la previa del partido entre ambos de la Segunda B. La Ertzaintza confirmó que fueron 49 las personas identicadas en la trifulca y una a la que se ha abierto diligencias, al parecer un vecino de Zarautz de 26 años. El herido de consideración que acabó ingresado en la UCI ya ha sido trasladado al Valdecilla de Santander. La Ertzaintza ha abierto un atestado por riña tumultuaria y agresiones, que una vez finalizado será remitido a la autoridad judicial.