REAL SOCIEDAD 1

R.C.D. ESPANYOL 1

 

La Real encadenó su cuarto partido consecutivo sin ganar en Anoeta ante un Espanyol que le controló muy bien en el primer tiempo y que agradeció cuando más sufría el cambio que Eusebio ha repetido en los últimos tres encuentros en el estadio y que tanto perjudica a su equipo.

Eusebio introdujo cuatro variaciones en su alineación con respecto a la que goleó al Vardar al entrar Odriozola, Iñigo Martínez, Kevin y Vela por Gorosabel, Aritz, De la Bella y Canales y su equipo acusó que el central solo ha podido jugar un partido esta temporada tras un verano complicado con las lesiones y que el mexicano tampoco está con el ritmo necesario. Jugó el partido completo en la derrota del Ciutat de Valencia y desde entonces había jugado solo 31 minutos ante el Betis en los últimos cinco partidos de los realistas.

Lo tuvo que cambiar de banda en el primer tiempo porque desactivaba el mayor peligro de la Real por la derecha y sacarlo del campo en el inicio del segundo para colocar a Oyarzabal ahí y buscar que combinara con otra velocidad con Odriozola y Xabi Prieto, que ayer no estuvieron tampoco a su nivel habitual.

Lo más difícil de entender es que, siendo el partido más complicado, Eusebio presentara un once mejor en Macedonia cuando el jueves tenía la oportunidad de meter en el once en Lleida a los dos para coger el ritmo de competición que necesitan. Iñigo Martínez es el mejor defensa de la Real sin género de dudas, pero ayer el central que mejor está se quedó en el banquillo para que jugara y cada cosa debe llegar a su tiempo.

Un gol como consecuencia

Iñigo Martínez no estuvo a su altura ni a la del partido y no siguió a Baptistao en una jugada en la que le fue a presionar y no le siguió como debía hacerlo cuando pasó el balón a Jurado y se fue al área. Tampoco Kevin Rodrigues defendió al jugador con el que estaba emparejado y le permitió centrar con la misma oposición con la que remató Baptistao. Ninguna.

Luego Iñigo quiso decidir el partido a lo Sergio Ramos y en los últimos minutos se fue al ataque y eso lo único que provocó fue que en un saque de banda en el que el central subió al área Illarramendi tuviera que ver su segunda tarjeta para cortar una contra que podía haber supuesto la derrota y que va a dejar a la Real sin su mejor jugador en el partido del domingo en Getafe. Y todo por ese empeño en los partidos de Anoeta de buscar sin cabeza la victoria cuando el partido está empatado. Y para eso Eusebio recurre a un cambio que no permite ni atacar ni defender mejor.

Por tercer partido consecutivo en Anoeta Canales sustituyó a Xabi Prieto cuando mejor estaba la Real en el segundo tiempo y, como en los anteriores, ahí se acabó el fútbol del equipo blanquiazul. Y en un momento en el que parecía cerca la victoria por la facilidad con la que llegaba hasta ese instante, el Espanyol cogió aire e Illarramendi tuvo que forzar la segunda tarjeta para defender el empate.

Mal primer tiempo

En el primer tiempo la Real no pudo imponerse al Espanyol, que demostró tener muy estudiado el sistema de juego de Eusebio con una buena presión de cuatro jugadores a la salida de balón de los dos centrales y los dos pivotes organizadores. Los blanquiazules no consiguieron superarla. Rulli no tenía más opción que los envíos largos a sus laterales o a sus jugadores más adelantados sin acierto ni el apoyo del público y la Real no fue capaz de llevar el partido al terreno que le conviene.

Illarramendi está menos cómodo en su nueva posición y solo Oyarzabal creó peligro en el primer tiempo en un centro que Vela no pudo cabecear a la red y en un disparo desde fuera del área al que Pau López respondió con una buena parada.

El Espanyol no hizo más en ataque porque se limitó a defender su ventaja y a cortar el juego de la Real con la ayuda inestimable de Melero López, que desquició a los jugadores y a los aficionados blanquiazules con su peculiar visión del reglamento.

La Real mejoró en el segundo tiempo, sobre todo con la entrada de Januzaj, que jugó sus mejores minutos como blanquiazul y dio la asistencia del gol de Illarramendi en un gran jugada individual. Ahí sí acertó Eusebio en esa sustitución.

Estuvo además a punto de marcar en una falta que tocó en un jugador espanyolista y salió a corner con Pau López vendido. No fueron las únicas ocasiones del inicio del segundo tiempo, porque además Oyarzabal realizó un disparo con la derecha que tocó en un defensa y obligó a una gran intervención del portero espanyolista y Willian José y Zubeldia tuvieron dos buenas opciones de disparo en las que no estuvieron acertados.

Pero cuando mejor estaba la Real llegó ese cambio y de ahí en adelante no tuvo la más mínima ocasión de peligro. Y eso que Xabi Prieto no jugó un buen partido, como la mayoría de sus compañeros, pero es un faro y un referente para los jugadores de la banda derecha y sin él el equipo pierde mucho y con Canales ahí nunca se gana.

En los últimos minutos la Real buscó el triunfo con más corazón que con cabeza, sin tener presente que cuando no se puede ganar un partido por lo menos no hay que perderlo. Y así Iñigo Martínez se olvidó de que era un defensa y se fue al ataque sin cabeza y eso el único efecto que tuvo fue que Illarramendi, que sabe jugar con una tarjeta como nadie, tuviera que ver la segunda para dejar a su equipo en Getafe sin los dos jugadores que hasta la llegada de Zubeldia daban equilibrio al equipo.

Y eso es lo triste, que Eusebio, que es un grandísimo entrenador y el artífice del gran nivel que ha alcanzado esta Real, acertó al elegir al azkoitiarra para conseguir dar equilibrio a su equipo y supo corregir los errores para cortar la sangría defensiva, pero ayer por unas decisiones equivocadas no ayudó a su equipo a romper la racha negativo de dos puntos en los últimos cuatro partidos de Anoeta.

Y para regresar a Europa hay que ser fuertes en el estadio y dar más importancia a la Liga. Y empezar a dar el ritmo de competición a los jugadores en la Copa y no repetir el mismo cambio que no da resultados.

 

Eusebio: «Hoy el equipo ha estado equilibrado»

En su comparecencia tras el encuentro, Eusebio Sacristán se mostró «contento» con sus jugadores, porque «el trabajo del equipo ha sido muy bueno, con buena mentalidad y actitud» teniendo en cuenta que el Espanyol «es un equipo que defiende muy bien, tiene un gran compromiso defensivo y una gran estructura defensiva». Explicó que «en esos minutos de tanteo no hemos estado lo vivos que teníamos que estar y nos ha supuesto un gol en contra. Eso complica más, porque el plan de ellos se ha reforzado. A partir de ahí hemos trabajo para ganar el partido. Hemos tratado de tener el control y generar ocasiones. No ha sido fácil pero las hemos tenido, hemos sido capaces de que ellos no tuvieran contraataques».

Destacó el equilibrio del equipo: «Hemos tenido una racha anterior al parón que hemos tenido buenas sensaciones en ataque pero en defensa no había equilibrio. Hoy el equipo ha estado equilibrado. En esta línea seremos capaces de ganar muchos partidos. Tenemos que seguir insistiendo en ello. Hemos hecho todo para conseguir el triunfo». El entrenador blanquiazul alabó el trabajo del revulsivo Januzaj: «Ha dado un paso grande y eso es una alegría para nosotros». Y también envió un mensaje a la Liga tras el arbitraje: «Hemos tratado de que se jugase el mayor tiempo posible. Nos hemos encontrado con que no lo conseguíamos. Todos los parones, lentitud a la hora de sacar… es una estrategia que utilizan otros equipos y el árbitro tiene que leer y decidir. Pediría que se revisase el concepto que en sí busca la Liga, que haya espectáculo».

En el otro bando, Quique Sánchez Flores dejó claro que «no fuimos mejores que la Real. Nos empujó mucho, nos llevó a su terreno, pero sí hicimos un trabajo para puntuar. No hemos perdido –dejar escapar dos puntos– por errores propios. Si hubiéramos estado más hábiles a la hora de sacar el balón, hubiéramos podido mantener esa ventaja».GARA

 

Primer partido con el Fondo Sur demolido

Los asistentes al encuentro pudieron ver desde dentro el estado de las obras del nuevo Anoeta con buena parte del Fondo Sur demolido y la lona como único impedimento para que los balones puedan llegar a los escombros.

 

Dos sesiones antes de jugar contra el Lleida

La Real se entrenará hoy y mañana a las 11.00 en Zubieta a puerta cerrada para preparar el primer partido de Copa que jugará el jueves en el campo del Lleida (19.30), tercer clasificado del grupo III de la Segunda B.

Protagonistas

Rulli. Tuvo un partido difícil porque recibió pitos antes incluso del gol, en el que el centro era complicado para él, y no estuvo acertado al dar una salida a su juego.

Odriozola. Acusó los días que ha estado parado por el esguince sufrido en Gasteiz y no estuvo a su nivel habitual.

Iñigo Martínez. Jugó su segundo partido de la temporada tras lesionarse en el primero en Riazor y se notó su inactividad. No estuvo bien en el gol, pero tampoco en otras facetas que domina como el inicio del juego. Quiso ganar el partido y eso influyó en la roja de Illarramendi.

Illarramendi. Marcó un buen gol, pero no está tan cómodo en la nueva posición. Se equivocó al protestar en la primera tarjeta y eso provocó su expulsión después.

Zubeldia. Aporta un gran equilibrio defensivo y volvió a demostrar su nivel, aunque no estuvo acertado en algunos envíos en largo.

Vela. Volvió al once tras cinco partidos de ausencia y también demostró la falta de ritmo de competición y de velocidad. Oyarzabal fue el mejor jugador realista y le faltó poco para marcar.