Beñat ZALDUA
BARCELONA
PULSO ENTRE CATALUNYA Y ESPAñA

ERC y PDeCAT abonan la búsqueda de una negociación con el Estado

Marta Rovira y Marta Pascal insistieron ayer por segundo día consecutivo en la idea de abrir una vía bilateral de negociación con el Estado tras el 21D. No parece, sin embargo, que Madrid esté por la labor, ya que Millo aseguró que no se devolverá el control de las finanzas a la Generalitat hasta que no se garantice un estricto «cumplimiento de la ley».

La palabra del momento en el diccionario catalán es bilateralidad. ERC y PDeCAT llevan dos días insistiendo en ella, sugiriendo así el cambio de fase que podría venir tras el 21D. Los comuns y el PSC se deleitan en el siempre presuntuoso «yo ya lo dije», mientras la CUP frunce el ceño y la base soberanista aguarda desconcertada. Ninguno de los dos partidos mayoritarios en el independentismo les ha explicado todavía cómo pretenden hacer efectiva esta bilateralidad que hasta ahora se había dado por imposible debido a la incomparecencia estatal.

La secretaria general de ERC, Marta Rovira, a la que se presenta en varios ámbitos como futura presidenta, dio a conocer el acuerdo de su partido con otras cuatro fuerzas menores –escisiones del PSC y de Unió, sobre todo– para el 21D, y aprovechó la ocasión para reivindicar que «siempre» han promovido la bilateralidad. De hecho, defendió que Esquerra «nunca ha hecho proclamas a favor de ninguna unilateralidad» y llamó a abrir una negociación con el Estado para respetar y aplicar los resultados que arrojen las urnas.

La coordinadora general del PDeCAT, Marta Pascal, fue todavía más clara: «No estamos en la pantalla unilateral». De hecho, pidió dejarla atrás en nombre de la «efectividad» y de la necesidad de «crecer en mayorías». «Ahora nos toca buscar nuevas formas para seguir adelante», concluyó en la Cadena Ser.

La advertencia de Millo

Pero quien no presenta propósito de enmienda, sino todo lo contrario, es el Gobierno español, cuyo delegado en Catalunya, Enric Millo, advirtió de que el control de las finanzas catalanas por parte de Madrid –algo que se hizo antes de aplicar el 155– seguirá después del 21D, y que solo se recuperará la normalidad cuando se garantice «el cumplimiento de la legalidad» por parte del nuevo Govern. También el presidente Rajoy se felicitó porque el 155 «ha serenado la vida política».

Donde quizá se dio la novedad más importante en cuanto a los escenarios posteriores a las elecciones fue en el PSC, que anunció que no hará presidenta a la candidata de Ciudadanos, Inés Arrimadas, si de sus votos depende. Esto significa que, si Iceta mantiene su palabra, el unionismo no podría formar gobierno pese a que los números lo permitiesen –algo que ninguna encuesta augura–.

Cinco vuelos chárter y decenas de autobuses rumbo a Bruselas

Faltan dos semanas para la manifestación catalana en Bruselas y ayer los organizadores, la ANC y Òmnium Cultural, avanzaron los primeros detalles sobre la convocatoria, para la cual ya hay fletados cinco vuelos chárter y contratados decenas de autobuses que saldrán de 70 puntos diferentes de Catalunya. El primer reto: superar las 15.000 personas que en 2001 se manifestaron en la capital belga en contra del trasvase del río Ebro. El principal objetivo: organizar la mayor manifestación que ciudadanos no belgas hayan realizado jamás en el corazón de la UE.

En rueda de prensa el vicepresidente de la ANC, Agustí Alcoberro, expresó el deseo de mostrar a Europa que el conflicto catalán «no es un asunto interno», sino un tema europeo en el que las instituciones «tienen que tomar partido». A su vez, el vicepresidente de Òmnium, Marcel Mauri, aseguró que la manifestación, que tiene como lema «Europa wake up», «tiene la voluntad de decir a la UE que no ha estado a la altura». «En Catalunya está en riesgo la democracia y, por tanto, también lo está en el Estado español y en Europa», añadió.

La manifestación recorrerá el centro de Bruselas, contará con actuaciones musicales y muestras de cultura popular catalana –no faltarán los «castellers»–, y concluirá con un acto político en el que intervendrán los representantes de las entidades, pero también representantes de otros países de Europa, según anticiparon ayer sin dar mayores pistas.B.Z.