Las huelgas sectoriales en la enseñanza pública no universitaria de la CAV concluyeron ayer con un amplio seguimiento a la convocada por ELA, LAB y Steilas entre las 26.000 profesoras y profesores, preámbulo del paro general al que llama para el 12 de diciembre la mayoría sindical, al también se han sumado CCOO y UGT. Mientras tanto, el departamento que dirige Cristina Uriarte sigue sin responder a los requerimientos de mejoras en las condiciones laborales de las plantillas y mayor inversión en la red, y ayer se limitó a restar respaldo a la movilización, cifrando su seguimiento en el 45,95% frente al más del 70% contabilizado por las centrales.

Tras un mes de lucha, la enseñanza pública no universitaria gestionada por el Ejecutivo de Lakua se prepara para afrontar la segunda huelga general en menos de siete meses; la anterior fue el 23 de mayo. Viendo el grado de movilización alcanzado ayer, los sindicatos son «optimistas» de cara a la convocatoria del 12 de diciembre.

Antes del inicio de la manifestación que recorrió el centro de Bilbo, secundada por varios miles de personas, los sindicatos incidieron en que el paro de los docentes era «una fase más de calentamiento» de cara a esa cita. La huelga superó el 70%, siendo «muy superior» en Primaria e Infantil. Las movilizaciones para exigir al Departamento de Educación que negocie también fueron importantes en Donostia y Gasteiz.

«Consideramos que lo que se demuestra es que los trabajadores respaldan las movilizaciones y los días de huelga, lo que nos refuerza de cara a la huelga general del 12 de diciembre y para futuras movilizaciones si, por la falta de movimientos por parte del Departamento de Educación, nos vemos obligados a continuar con ellas», expuso Alain García, delegado de ELA.

Entre las reivindicaciones sindicales está la de aumentar la inversión en la red pública en un 3,5% del PIB, hasta alcanzar la media europea, «para llegar progresivamente al 6%, mínimo recomendado por la Unesco». Además, se proponen 1.800 personas más en la plantilla de docentes «para poder hacer frente al incremento de matriculación de los últimos años, al aumento de las cargas de trabajo y a todas las necesidades de los centros».

Otra demanda es la de reducir la actual tasa de temporalidad del 38% al 6%, lo que obligaría a estabilizar a más de 6.000 trabajadoras y trabajadores de la enseñanza, y apostar por el descenso de un 10% en los ratios de alumnos-aula. También se reclama revertir el recorte salarial y recuperar el poder adquisitivo del profesorado, asegurando que en Infantil y Primaria hay una pérdida acumulada mínima de 32.500 euros, que llega a 41.100 en Secundaria.

Frente a esas y otras reivindicaciones, LAB, ELA y Steilas acusan al Gabinete Urkullu de no haber mostrado «ninguna voluntad para iniciar una verdadera negociación». «En el proyectos de presupuestos hecho público estas últimas semanas, con un importante despliegue propagandístico, no se recoge ninguna medida que dé salida a la situación actual, ni para el personal docente ni para el resto de sectores de la enseñanza pública que están en lucha», denunciaron.

En la Cámara de Gasteiz

Mientras Bilbo, Donostia y Gasteiz eran escenario de importantes manifestaciones, reflejo del seguimiento de la convocatoria de huelga entre los docentes, en el Parlamento de Gasteiz se debatió una proposición no de ley de EH Bildu en la que se reclamaba al Ejecutivo que incrementara la dotación de los presupuestos en Educación para 2018, como primer paso para atender las demandas de los trabajadores de la enseñanza pública no universitaria.

Los partidos que apoyan el proyecto de cuentas rechazaron la iniciativa, que sumó a los votos de los independentistas los de Elkarrekin Podemos.

PNV, PSE y PP sacaron adelante una enmienda transaccionada en la que instaron al Gabinete Urkullu a seguir negociando y profundizando en la mejora de las condiciones laborales de todos los profesionales que conforman la comunidad educativa y a garantizar que los contenidos que resulten de esa negociación sean «viables».

Desde las filas de EH Bildu, Rebeka Ubera no dio credibilidad a la propuesta de PNV, PSE y PP de «seguir negociando», ya que la oferta realizada a los sindicatos en la mesa de negociación el pasado mes de setiembre no tiene reflejo en las partidas que se contemplan en el proyecto de presupuestos para 2018. «Hoy ha quedado claro que la oferta de la consejera de Educación no era sincera y que carece de voluntad real de llevarla a cabo», subrayó Ubera.

Por contra, la parlamentaria jeltzale Jone Berriozabal aseguró que la disposición del departamento que dirige Cristina Uriarte a negociar es «absoluta« y que el Gobierno es «el mayor interesado en que el profesorado cuente con unas buenas condiciones laborales».

El PNV censuró la actitud de los representantes de los trabajadores en el proceso negociador y les invitó a que cesen en su campaña de movilización, que tiene el 12 de diciembre como próximo hito, aunque no el último. «Creemos que no hay razones objetivas para estas huelgas permanentes. Apelamos –dijo Berriozabal– a la responsabilidad de todos los implicados y pedimos a los sindicatos que aparquen esa estrategia y se acerque a las negociación».

La parlamentaria jeltzale pidió también a EH Bildu y Elkarrekin Podemos que dejen de trasladar las reivindicaciones laborales a las familias y al alumnado, porque «lo único que hacen es confundir reclamaciones laborales con reclamaciones del sistema, y eso no es ni ético ni sincero».

 

La comunidad educativa navarra sale a la calle contra los recortes

Hasta trece concentraciones tuvieron lugar la tarde de ayer en igual número de localidades navarras para reivindicar la reversión de los recortes que ha sufrido la enseñanza pública y unos presupuestos «dignos» para educación. El llamamiento a la comunidad educativa partió de los sindicatos LAB, Steilas y LAB, y también cuentan en esa demanda con el respaldo de Sortzen, que incide en las importantes carencias que tienen los centros públicos del herrialde.

La plaza del Ayuntamiento de Iruñea, Tafalla, Tutera, Lizarra, Elizondo, Antsoain, Burlata, Doneztebe, Zangoza, Atarrabia, Uharte, Barañain y Zizur Nagusia fueron las localidades donde tuvieron lugar estas movilizaciones.

No fueron las únicas relacionadas con el ámbito educativo que se realizaron ayer en el herrialde, ya que representantes de Steilas y ELA se concentraron ante la sede de la Confederación de Empresarios de Navarra (CEN) para exigir al Ejecutivo de Uxue Barkos que la oferta educativa para el empleo se organice desde el Departamento de Educación, haciendo uso de los centros de Formación Profesional y otros de la red pública.

Steilas y ELA rechazan la solución de la libre concurrencia de empresas para la adjudicación de la formación de personas empleadas o en búsqueda de empleo como alternativa a la anterior, que controlaban la CEN y los sindicatos UGT y CCOO con dinero público .GARA