Imanol Intziarte
Periodista
IKUSMIRA

Ser algo «de provecho»

El Mundial de fútbol de Italia 90 me coincidió con las semanas previas a los exámenes de Selectividad. Huelga explicitar cuál fue mi prioridad. Ni puñetera idea de Heidegger, pero no se me olvida el escupitajo del holandés Frank Rijkaard al alemán Rudi Voeller.

Las recomendaciones del tutor de Mundaiz cayeron en saco roto y el mundo perdió un posible ingeniero, físico, matemático… Posiblemente no hubiera pasado de primer curso, pero vaya usted a saber.

Luego el destino monta sus carambolas, pasa el tren y te subes. Hasta que llegas a creer que tienes que desear ser visir en lugar del visir, como Iznogud. No es que uno quiera ser visir, sino que cree que tiene que desearlo, porque lo contrario es de perdedores.

Pero de todo se sale, incluso de las drogas del ego. La farmacia es tu amiga y hay profesionales con varios años de carrera que te echan una mano. Y tipos como Enrique Ballester, que escribe de muerte y te transmite la sensación de tocar el cielo siguiendo al Castellón en Tercera División.

He vivido en París una final de la Champions de rugby y espero repetir en San Mamés. He caminado por la zona mixta de Anoeta a un metro de Ryan Giggs y Wayne Rooney. Y gasto un día de fiesta para ver la Super Bowl en directo por la tele y escribir sobre ella. Por la francesa, que lo suelen emitir gratis en abierto y la vaca no da más leche.

Así que a ver cómo dentro de unos pocos años le recomiendo a mi hija que estudie algo «de provecho». Sobre todo cuando su padre está maquinando desde ya cómo disfrutar en vivo del Mundial de rugby de 2023 y de los Juegos Olímpicos de 2024. Es que son al lado de casa, joder.