GARA

Un avión comercial se estrella en Azawad con 116 ocupantes

La desaparición en el cielo de Azawad de un avión comercial de la compañía argelina Air Algérie con 116 personas a bordo, en la madrugada de ayer cuando volaba entre Uagadugú y Argel, es el tercer siniestro aéreo -mientras no se confirme que el vuelo MH17 de Malaysia Airlines fue derribado por un misil- en siete días, tras los sucesos de Ucrania y Taiwán. Las autoridades de Burkina Faso aseguraron haber hallado sus restos al sudeste de Gossi, junto a la frontera.

Los restos del avión de Air Algérie desaparecido en la madrugada de ayer cuando volaba de Uagadugú, capital de Burkina Faso, a Argel, capital de Argelia, fueron localizados anoche en el sur de Azawad, en una zona desértica cerca de la frontera con Burkina Faso, confirmó el jefe del Estado Mayor de la Presidencia voltense, general Gilbert Diendere.

El aparato, que volaba con 116 personas a bordo, fue encontrado a unos 80 kilómetros al sudeste de la ciudad de Gossi, próxima a la frontera con Burkina Faso, declaró Diendere citando como fuentes a habitantes de esa zona que vieron estrellarse la aeronave. «Creemos que es una fuente fiable, porque (su información) se corresponde con las últimas imágenes del avión en los radares antes de perderse el contacto con el control aéreo», dijo el general.

Unas horas antes, el presidente de Mali, Ibrahim Boubacar Keita, informó del hallazgo de posibles restos de la aeronave entre las ciudades de Aguelhoc y Kidal.

El avión, salió de Uagadugu, capital de Burkina Faso, a las 01.17 GMT y estaba previsto que aterrizara en Argel cuatro horas después, pero su rastro se perdió a las 01.55 GMT cuando sobrevolaba la región de Gao, en Azawad, momento en que se hizo el último contacto por radar. A bordo iban 110 pasajeros -51 de ellos del Estado francés- y seis miembros de la tripulación, uno de los cuales es natural de Donostia.

Fuentes de Air Algérie habían indicado que el avión «no estaba lejos de la frontera cuando se ha pedido a la tripulación que cambiara de ruta por la mala visibilidad y para evitar un riesgo de colisión con otro avión». La señal se perdió tras el cambio de rumbo. «Ha desaparecido en Gao, a 500 kilómetros de la frontera argelina», declaró el primer ministro argelino, Abdelmalek Sellal.

Ningún gobierno de los afectados adelantó una posible causa de lo ocurrido con el avión, aunque primaba la tesis de que el mal tiempo reinante en la zona hubiera sido la causa de los problemas de la aeronave.

Precisamente estas condiciones eran las que, según diversas fuentes, podrían estar tras el posible accidente del avión, pues el piloto contactó con el aeropuerto de Uagadugu, poco después de despegar, ante las fuertes rachas de viento e intensas lluvias.

También fuentes de Air Algérie, aunque de modo no oficial, privilegiaban la pista de las condiciones meteorológicas.

La zona donde aparecieron los posibles restos del avión está cerca de Aguelhoc, una área donde los grupos yihadistas que aún quedan en Azawad se han mostrado muy activos últimamente, lo que podría dificultar las tareas de rescate, que ya se anunciaban complicadas por las condiciones meteorológicas turbulentas.

El avión de Swiftair desaparecido ayer había pasado sin problemas el martes un control de la Dirección General de la Aviación Civil francesa en Marsella.

Esta ha sido una semana trágica para la aviación civil, ya que en tan solo siete días se han registrado tres accidentes aéreos con 462 fallecidos.

El más grave fue el ocurrido el pasado 17 en el este de Ucrania, donde se estrelló un Boeing 777 de Malaysia Airlines con 298 pasajeros, presuntamente derribado por un misil tierra-aire, según Washington.

El último, antes del de ayer, tuvo lugar el miércoles en las taiwanesas islas Penghu, cuando un avión con 58 ocupantes -48 de los cuales fallecieron- se estrelló cuando realizaba un aterrizaje de emergencia.