«Ofrecemos nuestra colaboración para todas las labores de conservación natural que puedan desarrollarse en La Zerrichera». Pedro García, director de ANSE (Asociación de Naturalistas del Sureste), expresaba así la disposición de los grupos ecologistas a trabajar junto a Kutxa para desarrollar planes que mantengan el entorno natural de los terrenos adquiridos por la caja guipuzcoana en 2006 y en los que no podrá construir un resort de lujo como tenía previsto. El Tribunal Superior de Justicia de Murcia rechazó el pasado 4 de julio el recurso de la entidad contra el decreto del Gobierno regional que restablecía la protección. Teniendo en cuenta que el terreno es propiedad de Kutxa, tanto ANSE como Ecologistas en Acción abogan por la colaboración entre la entidad, las instituciones y la sociedad civil para garantizar la conservación natural de la zona.

«Pedimos a la administración que obligue a los propietarios a restaurar el estado inicial del ecosistema o que ellos lo hagan de motu propio. Debe replantarse y restaurarse la fauna», defendió Pedro Luengo, miembro de Ecologistas en Acción. Según explicó, antes de la recalificación del terreno aprobada por el Ayuntamiento de Las Águilas, se roturó la zona para poner en marcha regadíos. Una práctica habitual que precede a la declaración de terreno urbanizable. Por eso, Luengo insiste en que «se vuelva al estado anterior». En ese mismo sentido, García apeló directamente a Kutxa. «Sería una muestra de que existe un cambio de actitud en la banca», argumentó, tras considerar que se deben «pedir responsabilidades» y arrojar luz sobre el proceso de compra.