El Departamento de Empleo del Gobierno de Gasteiz dio a conocer ayer la -Estadística de la Economía Social en 2013- en la que se constata que las cooperativas y sociedades laborales extendieron en 2012 sus redes internacionales, de forma que su grado de apertura al exterior se cifró en el 59,7%, cinco puntos más que en 2010.

El informe, de carácter bienal, refleja el incremento de ventas en el mercado europeo y mayor presencia de la industria manufacturera en Asia y Latinoamérica que protagonizaron las empresas exportadoras entre 2010 y 2012. El estudio destaca que, en este periodo, las 262 cooperativas y sociedades laborales dedicadas a la exportación «recuperaron parte del músculo perdido al inicio de la crisis». El mayor volumen de ventas por este capítulo propició que su grado de apertura al exterior se situara en el 59,7% en 2012, cinco puntos más que en 2010.

Por número de plantas de producción, las empresas exportadoras representan el 10,46% de la Economía Solidaria. En 2012, estas marcas, integradas fundamentalmente en el sector industrial (metalurgia y fabricación de productos metálicos) facturaron 4.476.783.176 euros (7,6% más que en 2010); de los cuales, 2.673 millones correspondieron a ventas en el exterior. Por el contrario, las más de dos mil empresas que no comercializan sus productos en el extranjero, ese mismo año facturaron un 13,6% menos que en 2010 (3.806 millones de euros).

Cambio en la UE

El estudio de Lakua asocia este avance de las exportaciones a «un cambio de sentido» en la evolución de las ventas a la Unión Europea (UE), un mercado que, en su opinión, «resulta especialmente complicado por la fuerte capacidad competitiva de las empresas de mayor nivel tecnológico».

En esta área geográfica, frente a la caída del 28,7% registrada entre 2008 y 2010, durante el siguiente bienio, las exportaciones a la UE aumentaron un 13,7%. A pesar de ello, el volumen de las exportaciones de 2012 (1.588,4 millones) resultó todavía muy inferior al registrado en 2008 (1.959,9 millones).

Donde no hubo ningún tipo de contención fue en el capítulo de las ventas al resto del mundo, con incrementos del 27,1% que prolongaron el aumento del 83,2% experimentado entre 2008 y 2010. En este ámbito, el papel creciente de Asia y Latinoamérica en la economía mundial se tradujo en un incremento continuado en el peso de las exportaciones del sector, alcanzando el 27,5% de la facturación de 2012. Como consecuencia de este impulso, el volumen de las exportaciones de la Economía Social en relación a su facturación ascendió desde el 26,3%, de 2010, hasta el 32,3% en 2012.

Recesión en el mercado interno

El informe subraya que «el apogeo» de las ventas en el exterior contrasta, sin embargo, con la recesión del mercado interno, hecho éste que explica, «en gran medida», el deterioro de los indicadores de rentabilidad del sector y, en definitiva, su pérdida de peso en el conjunto de la economía vasca.

El bienio 2010-2012 se caracterizó por una significativa reducción del empleo que afectó, tanto a las cooperativas como a las sociedades laborales, pero principalmente a estas últimas. Entre todas, se pasó de 59.915 empleos en 2010 a 55.809 en 2012.

Ello supuso más de cuatro mil empleos netos perdidos en dos años que se sitúan lejos de los 63.480 de 2006, año en que el sector alcanzó el nivel máximo de ocupación. No obstante, parte de esta caída tiene que ver con el paso de alguna empresa significativa de la Economía Social al sector mercantil.

La recesión de la ocupación afectó fundamentalmente a los Servicios (-10,3%), pero también, aunque en menor medida, a la Industria (-3,0%), que ya venía lastrada por un bienio anterior muy negativo para el sector. Gipuzkoa consolidó su papel dominante en la Economía Social con el 21,2% frente, al 7,2% de Bizkaia, y al 5,7% de Araba.