Magdalena TSANIS (Efe) VENECIA

Ramin Bahrani pone el dedo en la llega de los desahucios

Con la película que ayer presentó a concurso, «99 Homes», el realizador estadounidense Ramin Bahrani pone el dedo en la llaga de los desahucios y la corrupción inmobiliaria que afloraron en Estados Unidos con el estallido de la crisis financiera.

La cinta, que cuenta con el siempre inquietante Michael Shannon («Boardwalk Empire», «El hombre de acero») en el papel de agente inmobiliario sin escrúpulos, ha tenido una buena acogida en el Festival de Venecia, donde competirá por el León de Oro.

«Este tipo de corrupción, en el que los criminales tratan cara a cara con los gobernantes, no ocurre sólo en Estados Unidos, se está haciendo sistémica en todo el mundo», declaró un combativo Bahrani.

Tanto él como Shannon y Garfield pasaron varias semanas en Florida -símbolo del desplome hipotecario- investigando y hablando con los afectados para llevar a buen término este drama sobre un hombre corriente (Garfield) que de un día para otro ve cómo el banco se queda con su casa.

La paradoja del destino es que el mismo tiburón que lo ha expulsado -Rick Carver (Shannon)- es quien le ofrece la oportunidad de recuperar su casa, eso sí, trabajando para él. «La pregunta clave que para mí plantea esta película es: ¿puedes sacrificar tu vida para tratar de cambiar un sistema que sabes que es inhumano?», señaló Garfield, que se entrevistó tanto con afectados como con agentes inmobiliarios para preparar el papel.

«Vulnerabilidad»

«Fui muy bienvenido y tratado en todos los casos», aseguró. «En el caso de las víctimas, me llamó la atención su vulnerabilidad y también lo abiertamente que compartían sus experiencias, como si necesitaran hacerlo para hallar algún sentido a esa situación completamente irracional», explicó.

El realizador Ramin Bahran, de origen iraní, explicó que es una película «muy personal» y que no pretende dar ninguna lección sobre la crisis financiera. «Para mí se trata sobre todo de personajes», señaló.

Unos personajes que, ya se trate del pez grande o del chico, representan el escalón más bajo de la pirámide social, los que parecen no tener más opción que elegir entre no tener nada o convertirse en hienas. Si hay que buscar culpables, el director apunta hacia arriba.

«El arte es más poderoso que el dinero»

«99 Homes» es un drama con elementos comunes a anteriores películas de Bahrani, interesado por cuestiones sociales y humanitarias, pero aquí añade ciertos ingredientes del cine de gángsters.

Comienza a quemarropa con la imagen de un suicidio, un desahuciado sin horizonte que decide quitarse de en medio. Y ese comienzo sintetiza lo que la película aspira a ser, un puñetazo en el estómago.

«Nadie fue a la cárcel por lo que pasó», lamentó ayer Bahrani. «Pero la gente está cansada y las cosas pueden empezar a cambiar. El arte es más poderoso que el dinero», concluyó. M.T.