Martxelo DÍAZ

Vecinos de Barañain reclaman reconocimiento a Karmele Solaguren

Al cumplirse diez años de la muerte de Karmele Solaguren en un accidente provocado por la dispersión, vecinos de Barañain han creado una iniciativa para reclamar el reconocimiento de lo sucedido y compromisos reales para acabar con esta medida de excepción.

Vecinos de Barañain han formado la iniciativa Karmele Gogoan cuando se cumplen diez años de la muerte de Karmele Solaguren en un accidente de tráfico en Soria cuando viajaba para visitar a su hijo Ekain Gerra, preso en la cárcel de Alcalá-Meco.

A Solaguren se la ha recordado todo los años, pero los impulsores de Karmele Gogoan consideran que es necesario dar un paso más y reclaman reconocimiento de lo sucedido y compromisos reales para acabar con la dispersión «para que no vuelva a suceder nada parecido».

«Vivimos tiempos de solución y, en ese sentido, se están dando pasos muy importantes en la resolución del conflicto que vive este pueblo. Aun así, la dispersión sigue vigente», denunciaron, antes de recordar que los dos presos de Barañain se encuentran a mil (Luis Goñi, en Almería) y 2o0 kilómetros (Xabier Sagardoi, en Soria) de sus casas.

«Para dar pasos hacia una resolución verdadera es imprescindible que el pueblo conozca lo ocurrido y construya su propia memoria, ya que no se puede avanzar sin mirar atrás», destacaron.

Para ello, han organizado diferentes actos que tendrán lugar en los próximos meses, como una mesa redonda sobre la dispersión, un concurso de fotos, una canción elaborada por diferentes integrantes de grupos de música de la localidad y un acto central en enero.

Karmele Solaguren falleció el 6 de diciembre de 2004, cuando sufrió un accidente de tráfico durante el viaje para visitar a su hijo Ekain Gerra en la cárcel de Alcalá-Meco. En el siniestro también resultó gravemente herido el padre del joven encarcelado, José Luis Gerra.

«No fue un accidente al uso, sino una consecuencia clara de la política de dispersión diseñada contra los presos vascos. Y no solamente eso, también ha sido, y sigue siendo por desgracia, un castigo directo a sus familiares. Son cientos los accidentes causados por la dispersión, en los que 16 personas han perdido la vida, entre ellas nuestra vecina Karmele», destacaron los impulsores de Karmele Gogoan.

«El conflicto político ha dejado consecuencias muy dolorosas. Es obvio que esto requiere de una profunda reflexión todavía por hacer. Por eso, desde Barañain queremos hacer nuestra aportación, y esta empieza por el reconocimiento a lo ocurrido a Karmele Solaguren», añadieron.