Amparo LASHERAS
Periodista
AZKEN PUNTUA

Necesitados de ilusión y de pasión

La entrevista a Arnaldo Otegi, publicada en ``Berria'', ofrece claves suficientes para un interesante y crítico debate sobre cómo conducir la estrategia de la izquierda abertzale en un tiempo nuevo, donde, de cara al futuro, los paradigmas del cambio de la acción política poseen ya una importancia histórica para Euskal Herria. De lo que he leído me gustaría resaltar dos conceptos poco utilizados en el lenguaje político y que, cuando aparecen, suelen pasar desapercibidos: ilusión y pasión. «Ahora más que cohesión se necesita ilusión y pasión para la lucha» reclama Otegi. Y recordé una reciente conversación en la que alguien añoraba esas fuerzas tan poco teóricas pero tan prácticas y vitales en la movilización y activación social en favor de los ideales que se persiguen. Alfonso Sastre en un artículo, publicado en este diario en 2010, escribía sobre algo tan poco convencional como «la política y los sueños» y reivindicaba la audacia, la ilusión y la pasión que pusieron en la lucha popular y política aquellos que se atrevieron con la «mag- na tarea» de la liberación de sus pueblos y de la clase trabajadora. ¿La ilusión y la pasión son factores capaces de convertir el posibilismo de una estrategia o proyecto en el atrevimiento de un sueño posible? No lo sé. Hasta Lenin, según Sastre, cuando se planteó la pregunta de qué hacer, admitió que «hay que soñar». Poner ilusión y pasión en la lucha significa, ante todo, creer en lo que se dice, en lo que se hace; llenar de fuerza y motivación popular el compromiso y la participación de abajo arriba que tanta credibilidad, unidad y firmeza irradia. Es lo que ha conseguido el pueblo catalán, lo que desea construir Podemos y lo que, tal vez, Euskal Herria y la izquierda abertzale deben de recuperar a marchas forzadas.