Iker BIZKARGUENAGA BILBO
RELEVO EN KUTXABANK

Un hombre fuerte del BBVA toma las riendas tras la marcha de Fernández

Contrariado por la polémica desatada en las últimas semanas y la falta de respaldo público por parte de quienes le encomendaron la misión de crear y blindar Kutxabank, Mario Fernández abandona el banco meses antes de lo previsto. Su sucesor en el cargo será Gregorio Villalabeitia, una persona con larga trayectoria en el mundo de las finanzas pero ligado sobre todo al BBVA. Desde EH Bildu insisten en pedir al PNV que revierta el proceso de privatización.

Mario Fernández acordó el pasado verano su salida de Kutxabank para el próximo mes de marzo, pero ayer presentó su dimisión en el transcurso de una reunión del consejo de administración de la entidad financiera. Había tomado la decisión de marcharse pocos días antes.

Por tanto, si bien es cierto que en el banco -más concretamente en BBK- han tenido tiempo para preparar la transición, también es verdad que el cese de su primer espada no ha sido todo lo rutinario que la entidad y algunos cargos institucionales, como el consejero de Hacienda de Lakua, Ricardo Gatzagaetxebarria, quisieron trans- mitir, ligando el adiós a la publicación de los test de solvencia, que han situado a Kutxabank en una cómoda posición en este ámbito. De hecho, en reuniones que mantuvo ayer mismo a modo de despedida, el propio Fernández dejó patente que se ha visto contrariado por la actitud que han mantenido en los últimos tiempos quienes le auparon a la presidencia de BBK primero y de Kutxabank, después.

Sintiéndose sin respaldo público y empujado por un carácter que, quienes le conocen, describen como refractario a la crítica, el abogado y financiero bilbaino habría decidido cerrar sin dilación su etapa al frente de la entidad nacida de la fusión de BBK, Kutxa y Caja Vital. Su futuro inmediato podría estar ligado a la docencia, concretamente en la Universidad de Deusto.

Con todo, se va convencido de que finalmente Kutxabank va a seguir por la senda que él ha trazado y que pasa por la desinversión masiva de las entidades fundadoras -más del 70%- y la entrada de capital privado.

Llega Villalabeitia

Ese camino, sin embargo, lo recorrerá de la mano de Gregorio Villalabeitia, cuyo nombre fue propuesto como sustituto por el presidente de BBK, Xabier Sagredo, al patronato de la fundación bancaria vizcaina, accionista mayoritario de Kutxabank.

Aunque conoce la casa por dentro, pues fue subdirector y director general de la Caja de Ahorros Vizcaina en los 80, la carrera profesional del próximo responsable de Kutxabank está ligada principalmente al BBVA, donde llegó procedente de Argentaria tras la fusión de 1999.

Precisamente, Villalabeitia coincidió con Fernández hace 15 años en el comité de dirección de esa entidad, uno como responsable de Banca de Inversiones y el otro de asuntos legales.

Igual que ocurriera antaño, cuando el PNV nutría la caja de ahorros vizcaina con cuadros procedentes del Banco de Vizcaya, parece que en Sabin Etxea han optado por una figura de renombre del banco de referencia para los jeltzales. Probablemente, en la opción de Villalabeitia -fuentes conocedoras del proceso de sucesión indicaron a GARA que se han barajado tres o cuatro candidatos- ha primado, además de su perfil «técnico», su carácter, si no dúctil sí menos cerrado y temperamental que el de Fernández, poco dado a aceptar que le lleven la contraria.

Llamamiento de EH Bildu

Lo cierto es que Mario Fernández ha cumplimentado la tarea que le fue encomendada cuando en verano de 2009 sustituyó a Xabier Irala en la presidencia de BBK. En estos cinco años ha liderado la fusión de la caja vizcaina con sus hermanas guipuzcoana y alavesa, y ha allanado el camino hacia la privatización de la entidad financiera resultante, transformando las cajas en fundaciones bancarias y abriendo la puerta a la entrada de capital privado. En este proceso, el próximo expresidente de Kutxabank ha contado con el apoyo inquebrantable del PP y el PSE, además, claro está, del PNV.

No ha sido hasta hace unas semanas, una vez cerrada la bancarización de las cajas, cuando han aflorado divergencias entre los jeltzales y Fernández. Conscientes del creciente malestar social existente por la deriva a la que han sido sometidas las entidades de ahorro, algunos cargos del PNV -de tanto peso como José Luis Bilbao e Iñigo Urkullu- han salido al paso de afirmaciones realizadas por el banquero, que ha hablado de dar entrada a socios privados y ha planteado abiertamente una salida a bolsa de Kutxabank, palabras que el lehendakari redujo a simple «hipótesis de trabajo».

Probablemente las diferencias son más de forma que de fondo, y en la posición mostrada por los mandatarios jelkides pesa la cercanía de las elecciones -hay quien habla de «postureo»-, pero el rifirrafe ha sido suficiente para que Fernández diga que «hasta aquí hemos llegado».

De momento, su dimisión ha sido aprovechada por EH Bildu para instar al PNV a «abrir el debate público y revertir el proceso de privatización de Kutxabank». Joseba Permach y Ainhoa Beola, consejeros de Kutxa, comparecieron en rueda de prensa para valorar la renuncia, que ligaron a las citadas declaraciones de Urkullu, y señalaron que las palabras del lehendakari «dando la razón a EH Bildu» y la dimisión de Fernández «no hacen sino corroborar la chapuza de un proceso orientado claramente a hacer desaparecer el control público y social sobre las cajas para convertir Kutxabank en un banco más al servicio de intereses especulativos particulares». En este sentido, y tras apuntar que Fernández «ha actuado en todo momento al dictado del PNV», opinaron que corresponde a ese partido «aclarar qué es lo que está pasando».

Para la coalición, «el proceso no es imparable», bien al contrario «hay margen para revertir el proceso de privatización».

En parecidos términos se expresó el diputado general de Gipuzkoa, Martin Garitano, quien invitó a todos los agentes a «corregir el rumbo» de Kutxabank «para que se garantice su permanencia en manos públicas».