Juanjo BASTERRA

Estado español y Estados Unidos, donde la desigualdad creció más

La Organización Internacional del Trabajo (OIT) calcula que entre 2006 y 2010 la diferencia entre el 10% de renta más alta y el 10% de la renta más baja aumentó en un 20% en el Estado español. Como conclusión fundamental, se establece que el Estado español y Estados Unidos lideran el incremento de la desigualdad.

El director de la oficina española de la OIT, Joaquín Nieto, afirmó que el Estado «puede permitirse subir los salarios tanto como mejora la productividad», de modo que existe «un margen real» para una subida salarial.

El organismo internacional presentó ayer el informe bianual mundial sobre «Salarios 2014-2015. Salarios y desigualdad de ingresos». En el mismo se confirma que la desigualdad comienza en el mercado de trabajo. «En las economías desarrolladas es donde más aumentó la desigualdad, ello se debió a menudo a la combinación de mayor desigualdad salarial y pérdida de empleos».

Frente a esta tendencia, en países como Portugal o Rumanía la crisis ha reducido la desigualdad por un efecto de «aplanamiento», por el que las rentas más altas disminuyen más que las más bajas. En otros países como Dinamarca, Países Bajos y Noruega «se ha combinado un crecimiento de los ingresos de los hogares con una reducción de las desigualdades».

El informe de la OIT revela que entre 1999 y 2013 los salarios aumentaron un 143% en los países en vías de desarrollo, mientras que en los desarrollados aumentaron solo un 6% y en el Estado español cayeron un 2%.

Un elemento negativo que destaca la OIT es la discriminación por razón de sexo. Las trabajadoras del Estado español «cobran un 17% menos que los hombres en puestos similares, mientras que la brecha salarial entre trabajadores e inmigrantes y locales es del 30%». Esa diferencia salarial también se lleva a los trabajadores informales también perciben un salario más bajo.