El vicepresidente egipcio, Mahmud Meki, ha afirmado que el jefe de Estado, Mohamed Morsi, está dispuesto a aceptar, con condiciones, un aplazamiemto del referéndum sobre la Constitución, previsto para el próximo día 15.

En declaraciones a las ediciones digitales de los diarios Al Ahram y Al Masry al Youm, Meki ha dicho que el presidente «está dipuesto a aceptar el retraso del referéndum con la condición de que se blinde este aplazamiento de recursos ante la Justicia».

Egipto es escenario de una división entre partidarios y detractores de Morsi, que han derivado en fuertes enfrentamientos entre los bandos.

La tensión se originó después de que el presidente emitiera el pasado 22 de noviembre una acta constitucional por la que blindaba sus poderes y se agudizó con la convocatoria de referéndum sobre la nueva constitución.

Meki ha explicado que, según la lay, Morsi está obligado a convocar un referénsum en quince días, tras el fin de los trabajos de la Asamblea Constituyente.

Esta tarde, la Comisión Electoral ha dedicido postergar para el próximo miércoles el inicio de la votación de los egipcios en el extranjero, que estaba previsto que comenzara este sábado. Según la agencia Mena la decisión responde a una petición del Ministerio de Asuntos Exteriores para que las respectivas embajadas puedan concluir los preparativos para llevar a cabo la consulta.

En cuanto al diálogo nacional que busca dar una salida a la crisis, Meki ha subrayado que la invitación está dirigida a todas las facciones y fuerzas opositoras.