A.G.
Laboral Kutxa Baskonia

Derrota en la prórroga en la última probatura

UNICS KAZAN 90

LABORAL KUTXA 86


No pudo llevarse la escuadra gasteiztarra la final de consolación de la Gomelsky Cup. El Unics Kazan –un trasunto de Bilbao Basket ruso debido a la presencia de Marko Banic, Quino Colom y Latavious Williams– se impuso en la prórroga por 90-86. Pero lo cierto es que los pupilos de Velimir Perasovic mostraron un nivel muy aceptable.

Un golpe en el costado de Adam Hanga y el hielo que se tuvo que poner Kim Tillie fueron las peores noticias de un Baskonia que, por otro lado, vio cómo Bourousis adquiría galones, así como las probaturas de un Perasovic que se confió al quinteto compuesto por Adams, Causeur, Blazic, Ilimane Diop y Bourousis en toda la segunda mitad, con muy escasa presencia de Shengelia.

Jugadores como Corbacho, Planinic o Mike James jugaron solo la primera mitad, y aunque el resultado no fue malo –13-23 al final del primer cuarto; 35-38 al descanso–, se conoce que al técnico de Split no terminaron de convencerlo.

La ausencia de Hanga permitió que Langford, desaparecido en la primera mitad, tomase el control del choque en la segunda, con el acompañamiento de Latavious Williams o Kaimakoglou.

En cambio, en el bando baskonista destacaba Darius Adams con 30 puntos, mientras que Bourousis y Diop formaron una interesante sociedad bajo el aro. El pívot griego demostró una buena capacidad de distribución, mientras que el gasteiztarra de Dakar, pese a sus errores de ímpetu, confirmó el paso adelante que viene dando en este primer mes.

La pena fue que los gasteiztarras no remataron la faena. En parte, por los tres tiros libres regalados a Colom en una falta de Diop con 72-75, y, ya en el tiempo extra, por el acierto de Milaknis y Kaimakoglou dentro del último minuto, producto del cansancio de los «cinco magníficos» de Perasovic.