A pesar de que objetivamente Lewis Hamilton redujera en siete puntos su desventaja sobre el líder del Mundial, se puede decir que su compañero Nico Rosberg mantuvo las distancias tras otro doblete de Mercedes, esta vez en México. Cuando solo quedan dos carreras para la conclusión de la temporada –son 50 puntos– la diferencia entre los dos pilotos de las balas plateadas es de 19 puntos, lo que se antoja suficiente, con la fiabilidad que está mostrando el piloto que busca estrenar su palmarés de títulos.

Hamilton conoce mejor que nadie sus opciones de obtener esta temporada su cuarto cetro mundial son remotas, por lo que hizo bien al celebrar haber alcanzado a un mito del automovilismo como Alain Prost con su victoria número 51 en la Fórmula 1. De paso, también sumó al Hermanos Rodríguez al listado de circuitos en los que ha pasado la bandera a cuadros en primera posición.

Los sustos, al principio

Con Nico Rosberg más pendiente de no cometer errores que pudieran complicar su camino hacia el título y la superioridad de los Mercedes sobre el resto, la lucha por la victoria resultó bastante descafeinada.

El mayor susto para los Mercedes se produjo en una salida bastante complicada. Hamilton retrasó mucho la frenada, hasta el punto de marcarse un recto en las dos primeras curvas. Sin embargo, su acción no fue castigada y siguió sin problemas.

Rosberg también tuvo su ración de suspense, ya que tuvo que que aguantar el acoso al que llegó a someterlo Verstappen. Pese a cruzar la meta en el tercer puesto, el holandés no pudo subirse al podio. En su lugar estuvo el tetracampeón Sebastian Vettel, beneficiado por un castigo al holandés poco después de cruzar la línea de meta.

Acosado por el germano, Verstappen se fue recto en una variante. Al recordar que Hamilton no fue castigado por su maniobra al inicio del gran premio, el joven holandés decidió no ceder la posición a Vettel, algo que hicieron finalmente los comisarios tras la prueba en forma de cinco segundos de sanción.

Al ver que Verstappen no era sancionado inmediatamente, Vettel llegó a dedicar unas duras palabras contra el director de carrera, Charlie Whiting. Cuando el holandés fue pronto castigado, pidió disculpas.

Por detrás, también hubo toques, como el de Carlos Sainz y Fernando Alonso, que terminó con otra sanción para el madrileño. Por lo demás, el Gran Premio resultó muy anodino.