«La gastronomía también es parte del deporte»

Vestidos con un chubasquero verde eran fácil de distinguir estos amigos de Albacete. Vienen del pueblo Casas-Ibáñez, cuyo nombre señalan con orgullo. Llegaron el viernes y se quedarán hasta hoy.

Los once corredores del grupo ya estaban juntos cuando el resto de amigos se acercaron a felicitarles (en total eran 29). «No somos los más rápidos pero tampoco somos los más lentos», señaló Emilia, la única mujer del club que se animó a correr la Behobia.

Al venir de un pueblo de 5.000 habitantes todos los corredores se conocían entre sí, pero el deporte les ha ayudado a estrechar lazos, ya que son de diferentes edades. Suelen acudir a una carrera los fines de semana, a la que va quienes pueden, y entrenan tres veces por semana.

Además de correr este grupo tenía otro objetivo: comer. «La gastronomía también entra dentro del deporte», apuntó Emilia, a lo que Toño, el presidente del club, respondió que «es el segundo aliciente».