El juicio contra el productor y depredador sexual Harvey Weinstein ha venido a coincidir con el estreno de “The Current War” (2017), película perjudicada por la caída del magnate de Hollywood. Se estrenó hace más de dos años en el festival de Toronto, pero como fue adquirida para su distribución y promoción de cara a los Óscar por TWC (The Weinstein Company) sufrió el desmantelamiento forzoso de la compañía, saliendo a la venta. Los derechos fueron comprados por Lanter Entertainment en tres millones de dólares. Entonces comenzó el calvario del director de origen mexicano Alfonso Gómez-Rejón, que había conseguido prestigio en el cine independiente con “Espera hasta que se haga de noche” (2014) y “Yo, él y Raquel” (2015). Su aterrizaje en Hollywood no pudo ser más catastrófico, ya que el montaje de la productora inicialmente lanzado fue muy criticado. Por fin se puede ver en nuestras salas el montaje alternativo del director, que no fue estrenado en los EEUU hasta el pasado 25 de octubre.

Se supone que esta es la versión que se acerca más al planteamiento original de Gómez-Rejón, que tuvo que hacer maravillas para sacar adelante su película de época con un presupuesto de 30 millones de dólares volcado en el reparto estelar. La histórica guerra a finales del siglo XIX por el control de la energía eléctrica entre Edison y Westinghouse es estelarizada respectivamente por Benedict Cumberbatch y Michael Shannon, con Nicholas Hoult como tercera en discordia en el papel de Nikola Tesla, junto a Tom Holland como Samuel Insull.