Laboral Kutxa Baskonia

A ganar al que machacó de 30 puntos al Olympiacos

Lamont Hamilton está mucho mejor y Sergio Scariolo espera que el de Brooklyn «podrá dar minutos».

ARMANI MILANO-LABORAL KUTXA

¿Que toca ir a jugar contra «el equipo que más en forma está de toda la Euroliga», tal y como dijera Sergio Scariolo? En efecto. ¿A ganar al mismo que hace ocho días infligía la primera derrota de la temporada al bicampeón continental Olympiacos? Al mismo. ¿A ese que machacó a Spanoulis y compañía por 30 puntos? Por supuesto.

«Queremos hacer un buen Top 16», resumía Sergio Scariolo en las horas previas a viajar hacia la capital lombarda, capital que el técnico de Brescia conoce como la palma de su mano, ya que antes de regresar a Gasteiz, Scariolo ejerció de preparador de este Armani Milano que a día de hoy maneja, en los términos referidos, Luca Banchi. «No queremos pasar por el Top 16 sin ambición y competitividad», subrayaba Scariolo, cuestionado sobre la necesidad de enlazar este partido con el duelo decisivo para buscar entrar en la Copa que jugará el domingo.

Hasta las casas de apuestas creen que los gasteiztarras saldrán escaldados del Mediolanum Forum -1,44 a 2,75 según Sportium.es-, por mucho que Laboral Kutxa Baskonia haya recuperado a Hamilton tras ser baja los dos últimos partidos por un traumatismo en el talón.

Fernando San Emeterio, por su parte, reconocía que «Milano puede ser un rival directo de cara a la pelea por los play offs, pero si seguimos haciendo las cosas como las venimos realizando últimamente, a pesar del buen momento de nuestro rival, tendremos opciones de ganar».

Sergio Scariolo apostillaba que «espero poder meterles un grano de arena en el engranaje que tienen, evitando que la faceta física sea la que determine el signo del partido». Y es que el de Brescia, aunque opinaba que «Lamont está mucho mejor y tendrá minutos», reconocía que «ellos tienen jugadores exteriores muy atléticos de gran envergadura, interiores con muchísima capacidad de intimidación y salto, fuerza atlética muy buena... El juego interior tendrá que apretar los dientes y hacer un esfuerzo frente a un rival que es el que más en forma está, y el resto tendrá que compensar».