Ahora llega el momento de rasgarnos las vestiduras y darnos de cabezazos contra la versión navarra del Muro de las Lamentaciones, sea esta el monolito de Amaiur o la Estatua de los Fueros. «¡Navarra cuestión de Estado¡», gritaremos a los cuatro cierzos. Así nos sentiremos más importantes e iremos con la cabeza más alta, más tiesos que un ajo. Es muy bonito pensar así, muy romanticón, pero supone sobrestimar dos cosas: a Nafarroa y al Estado. Seamos serios, la política en el Estado la decide el conjunto poblacional políticamente más memo. Me refiero a esos cientos de miles de personas que que unas veces votan al PP y otras, al PSOE. Les llaman «el centro» y los dos grandes partidos (en lo numérico) se matan por él.

En los últimos años han brotado los medios de comunicación de extrema derecha que tienen cada día menos respeto por el rigor periodístico. Estos medios han aparecido en prensa, televisión e internet y son lo suficientemente variados como para retroalimentarse y crear una realidad paralela. Más o menos, como Tele 5 con «Gran Hermano» y «Sálvame Deluxe». Y funciona. Esos cientos de miles de memos políticos de centro han quedado prendado por el show derechón y se lo tragan todo con patatas. Y ocurre que el PSOE sabe que necesita encandilar a ese «centro» si quiere volver a gobernar. Y para encandilar a un memo, hay que comportarse como un memo. Eso es lo que ocurrió el miércoles. No tiene más, nada de tragedias históricas ni maldiciones, ni estrategias sibilinas para acabar con la Nafarroa indómita (otra falacia). Nada. Pura y dura estupidez digerible para un estómago estúpido. Por eso el comunicado del PSOE da risa cuando dice que necesitó hacer una ronda de contactos para verificar que sin Bildu no podía sacar la moción de censura. ¡Venga ya! ¡Que le hacían falta 26 votos de los que 13 eran de Bildu!

Tristemente, si Rubalcaba pone en la balanza el peso numérico de la horda idiota y el de Nafarroa, perdemos siempre. Lo que aporta el PSN al partido es menos del 1% del respaldo del PSOE a nivel estatal. Nafarroa importa un pimiento.