Asier AIESTARAN
Campeonato de Parejas

Balance positivo de la primera fase

La emoción hasta la última jornada y la respuesta del público avalan un formato que debe seguir puliendo el tema de las suplencias.

Finalizada la liguilla de cuartos del Parejas, y cuando el campeonato va a entrar ya en su recta final, parece un buen momento para hacer balance de lo que ha deparado esta primera fase. Tres meses casi exactos de competición y un total de 56 partidos que, salvo contadas excepciones, han logrado mantener vivo el interés por el torneo más largo de la temporada pelotazale.

En una competición larga con un formato de liguilla, donde el «único» premio para cuatro de las ocho parejas en liza es lograr la clasificación para la siguiente fase, mantener viva la emoción hasta el final se antoja como la gran clave para hacerla atractiva. Y este año se puede decir que ese objetivo se ha cumplido con creces. Es cierto que dos duplas, Olaizola II-Aretxabaleta y Martínez de Irujo-Barriola, se embolsaron el billete con mucha antelación, demasiada quizás para el bien del campeonato, pero por otro lado, es igualmente destacable que hasta tres parejas llegaron con opciones a la última jornada, con el vibrante encuentro de Arrigorriaga como colofón, y todas tenían alguna a falta de dos, lo que no había ocurrido en los años anteriores. Hay que agradecer el trabajo previo de intendencia para componer las combinaciones más equilibradas, con la dificultad que ello contrae pero que vuelve a revelarse como indispensable en pro de la emoción.

Igualdad

También se puede decir que esa igualdad previa sobre el papel, reflejada en la clasificación, se ha ido demostrando jornada a jornada, partido a partido. En 37 de los 56 encuentros disputados, el perdedor ha sumado 15 tantos o más, lo que da un porcentaje bastante aceptable del 66% -ha habido cuatro jornadas en las que todos los perdedores han llegado a ese listón-. Además, hasta seis choques han terminado 22-21 -cuatro de ellos con Berasaluze II-Albisu de protagonista-, y ha habido otros seis con un 22-20 final. El hecho de que algunas parejas ya clasificadas no se hayan dejado llevar en estas últimas semanas -Olaizola II ha ganado sus tres últimos partidos pese a no jugarse nada, al igual que Retegi-Barriola o Xala-Zubieta en la última jornada- ha contribuido a que el campeonato mantuviera el pulso competitivo hasta el final de la liguilla de cuartos.

Cambios

El de los cambios y las suplencias es probablemente el mayor hándicap para poder organizar un campeonato tan largo como el Parejas, un peaje a pagar que no parece tener fácil solución de cara a futuro. En un deporte en el que las manos sufren tanto, más todavía si cada choque se juega a cara de perro, las bajas -obligadas o preventivas- van a seguir siendo parte del decorado en futuras ediciones -tal y como sucede con los aplazamientos en las finales-. Por eso, lo que sí cabe pedir a las empresas es que planifiquen bien las posibles alternativas, que cuiden a los suplentes que van entrando en la competición, y que intenten alterar lo menos posible el espíritu de la misma. En ese sentido, la experiencia también es un grado. De momento se han contabilizado 20 sustituciones -dejando de lado el cambio técnico de Ibai Zabala por Ladis Galarza-, con 9 victorias y 11 derrotas para los suplentes, unas cifras muy correctas. Eso sí, es preocupante la diferencia entre delanteros y zagueros. De esas 20 suplencias, 14 han sido de zagueros, con 8 victorias (57%), y 6 de delanteros, con solo un triunfo (17%). Entre los suplentes, Begino ha sido el más utilizado con 6 partidos, aunque solo ha podido ganar uno. La otra cara ha sido la de Cecilio, con 3 victorias en 4 apariciones.

Público

Finalmente, en lo que se refiere a la respuesta del público, una vez más hay que rendirse ante el tirón que sigue manteniendo el Parejas en un contexto delicado. Plazas como el Labrit, que prácticamente se ha llenado en cada uno de los diez choques que ha acogido, o el Adarraga, con seis grandes entradas en el año del adiós para Titín III, se han alternado con incursiones en Ipar Euskal Herria -cuatro citas saldadas con éxito de público- o en diferentes localidades vizcainas -con llenazos en Markina o Arrigorriaga estas últimas semanas-. Y el trabajo que se está haciendo en Donostia y Gasteiz también se verá recompensado en semifinales.

Las semifinales, en Eibar y las capitales

Aspe y Asegarce ya han definido las fechas y los frontones en los que se desarrollarán las semifinales del Parejas. Tal y como se había anunciado, Olaizola II-Aretxabaleta y Martínez de Irujo-Barriola abrirán la liguilla este sábado en el Ogeta de Gasteiz, mientras que Xala-Zubieta y Urrutikoetxea-Beroiz se medirán el domingo en el Astelena de Eibar. Ya en la segunda jornada, los partidos tendrán lugar el sábado 5 de abril en el Labrit de Iruñea y el domingo 6 en el Atano III de Donostia. Y los finalistas se decidirán el sábado 12 también en el Labrit y el domingo 13 en el frontón Bizkaia de Bilbo. También se fijó día y hora de las primeras elecciones de material: la de Gasteiz mañana a las 11.30 y la de Eibar el jueves a la misma hora.

En cuanto al Parejas de Promoción, Mendizabal III-Tolosa y Jaka-Rezusta darán inicio a las semifinales este viernes en un Atano III donostiarra recuperado para la causa, mientras que el otro duelo de la primera jornada se jugará el sábado en Ezcaray entre los riojanos Gorka-Merino y Víctor-Untoria. Además, eliminados del Parejas como Ezkurdia y Zabaleta, el viernes en Donostia, o Albisu, el sábado en Gasteiz, no descansan y seguirán jugando. A.A.