GARA DONOSTIA
TOUR | Declaraciones

«Conozco bien los sprint»

Navardauskas temió que le alcanzaran a 20 metros de la meta como a Bauer.

Ramunas Navardauskas (Garmin) se ha convertido en el primer lituano que gana una etapa en el Tour. Ayer saltó a falta de algo más de 10 kilómetros para el final, sabedor de que los equipos de los sprinters iban tras su fuga y temeroso de que le pillaran antes de cruzar la meta.

Eso le pasó a su compañero de equipo, el neozelandés Jack Bauer en la etapa de Nimes. «Temía que me sucediera lo mismo, conozco bien los sprint, sé la velocidad que alcanzan y por eso me he entregado a fondo hasta el último momento», dijo el ciclista, que cruzó la meta con 7 segundos de ventaja sobre la avanzadilla del pelotón.

Navardauskas aseguró que tenían planeado atacar en los últimos kilómetros «porque al sprint» no hay opciones ante hombres tan rápidos como Kittel. Dedicó la victoria a David Millar, a quien sustituyó pocos días antes de que arrancara el Tour por que estaba enfermo.

Por su parte, Vincenzo Nibali (Astana) reconoció que no tiene nada que ganar en la contrarreloj de hoy aunque «por respeto al Tour, al maillot amarillo y al equipo, la correré como un líder». El siciliano sigue sin dar por descontada la victoria final «por superstición», motivo por el que también evita planear lo que hará cuando se concrete. Esa ha sido su norma desde que se encaramó al primer puesto de la general y la mantendrá hasta llegar a París.

También por ello Nibali trató de repetir el jersey amarillo que se enfunda cada día, pero tuvo que renunciar a este capricho. «Al lavarlo se borraban los nombres de los patrocinadores y no he podido repetirlo», dijo.

El siciliano tuvo que responder un día más preguntas relacionadas con el dopaje. Aseguró que vivió «los años de Armstrong desde lejos, como un joven que lo miraba en televisión» y que «ahora el ciclismo ha cambiado».

En cuanto a su equipo, el Astana, implicado en el pasado en diversos casos de dopaje, el Tiburón indicó que «no es la misma gente ni el mismo compromiso en la lucha contra esa lacra». También se le recordó que su director es el kazajo Alexandre Vinokourov, que dio positivo precisamente en la ronda gala, a lo que el italiano respondió con «ya ha dado las explicaciones, fue sancionado y ha cumplido su pena», por lo que consideró normal que esté de nuevo trabajando en el ciclismo.

«Este no es el mismo Astana que el de hace unos años. Han venido algunos patrocinadores muy comprometidos contra el dopaje y que pretenden que todo el mundo se sienta orgulloso de este equipo», concluyó.