El ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, se ha mostrado dispuesto a «adecuar el ordenamiento jurídico» para perseguir a internautas. Lo ha asegurado durante la interpelación sobre Derechos Humanos realizada por Rafa Larreina, diputado de Amaiur, quien ha censurado operaciones policiales como la desarrollada hace dos semanas por la Guardia Civil en la que fueron detenidos 21 tuiteros acusados de «enaltecimiento del terrorismo».

«Si hay que adecuar el ordenamiento jurídico para hacerlo más efectivo, estamos dispuestos», ha indicado el titular de Interior.

En esta ocasión ha centrado su discurso en el «terrorismo yihadista». Según su tesis, las redes sociales son un elemento clave para la «captación, adoctrinamiento» e incluso para el traslado de activistas, antes a Afganistán y actualmente a Siria. En este contexto, el ministro ha hecho referencia al concepto de «autorradicalización» que, en su opinión, se desarrolla a través de internet.

Con estas referencias al yihadismo, el ministro ha eludido hacer mención a un proyecto que ha vuelto a ponerse sobre la mesa después de la muerte a tiros de la presidenta de la diputación de León, Isabel Carrasco: el control de los comentarios en Twitter y Facebook. «Estoy seguro que hay comentarios que tanto a usted como a mí nos resultan inaceptables», se ha dirigido a Larreina. «No se trata de limitar la libertad de expresión, ni el derecho a la información. Se trata de hacer compatibles estos derechos con otros derechos y obligaciones. No se puede impunemente hacer apología del delito o incitar al odio», ha sentenciado.