El cuerpo de la mujer que apareció ayer muerta en Asparrena permanece en el Servicio de Patología Forense de Gasteiz, donde se le practicará la autopsia, que permitirá la identificación fehaciente de la víctima, aunque al parecer corresponde al de la joven de 28 años cuya desaparición había denunciado su familia el pasado 15 de junio.
El considerado principal sospechoso del crimen por parte de la Policía alemana es un varón de 41 años que fue detenido por la Guardia Civil en Jaén, sobre el que pesaba una orden de detención europea.
La joven desapareció el jueves de la semana pasada y al día siguiente su familia interpuso una denuncia. La Policía alemana dictó una orden internacional de búsqueda y comunicó sus sospechas de que la mujer podría estar en algún área de servicio del Estado español.
Tras recibir esta euroorden, la Ertzaintza inició un dispositivo de búsqueda que permitió localizar el cadáver hacia las 15.20 de ayer en Asparrena en las inmediaciones de una gasolinera, junto a la autovía A-1. Tras el hallazgo del cuerpo, que presentaba signos de violencia y estaba en un avanzado estado de descomposición, una comitiva judicial se desplazó al lugar para el levantamiento del cadáver y su posterior traslado al Servicio de Patología Forense de la capital alavesa. El autor de crimen trató de quemar el cuerpo.
Las diligencias del caso han sido remitidas al Juzgado de Instrucción número 3 de Gasteiz que ha decretado el secreto de sumario.