Como dijo la niña de ‘Poltergeist’, ya están aquí. La NFL afronta en enero sus play offs, ese camino lleno de peligros del que solo saldrán con vida dos equipos para disputar la LIII Super Bowl, la noche del 3 de febrero en Atlanta.

Durante 17 semanas –16 partidos y una de descanso–, la fase regular ha hecho su criba, para dejar en 12 el número de aspirantes. En la Conferencia Americana (AFC) abrirán el fuego Houston Texans e Indianápolis Colts, rivales directos en la División Sur. Será este sábado a las 22.35, hora de Euskal Herria. Los tejanos han terminado por delante, con 11 victorias y 5 derrotas, frente a un balance de 10-6 de los Colts.

Houston contará con el factor cancha de su lado. Pero ojo, que los dos enfrentamientos de esta temporada se saldaron con ajustada victoria visitante. El 30 de setiembre, Houston ganó 34-37 en Indianápolis –rompiendo así su pésimo arranque de tres derrotas seguidas–; mientras que hace menos de un mes, el 9 de diciembre, los Colts devolvieron la moneda (21-24), finiquitando la racha de nueve triunfos consecutivos de sus rivales.

Papeles muy definidos en el ataque de los Texans. El joven quaterback Deshaun Watson (23 años, 2ª temporada) lleva la manija, con DeAndre Hopkins como receptor principal. Suma 11 touch downs (TD) y 1.572 yardas, el segundo en esta estadística solo por detrás de Julio Jones (Atlanta), con 1.677. La carga del juego terrestre recae principalmente sobre los hombros de Lamar Miller.

En defensa destaca la dupla de cazadores de quaterbacks que conforman J.J. Watt y Jadeveon Clowney. Entre ambos suman 25 de los 43 sacks del equipo. Solo Aaron Donald (Rams), con 20,5, supera los 16 del mayor de los hermanos Watt, un héroe en Houston y no solo en el plano deportivo, después de su labor para recaudar fondos para los damnificados por el huracán Harvey en el verano de 2017.

El resurgir de los de Indiana tiene nombre propio, Andrew Luck. El brillante quaterback se perdió toda la campaña anterior por una operación en el hombro, una lesión que arrastraba desde 2015. Su larguísimo y misterioso proceso de recuperación dio pie a las más diversas especulaciones, incluso se habló de una posible retirada.

Todo lo contrario. Los Colts han saltado de las 4 victorias de 2017 a la decena de este curso. Luck es el quinto en yardas ganadas por pase, con 4.593. Eric Ebron y T.Y. Hilton –con 13 y 6 TD respectivamente– son sus socios favoritos, mientras que Marlon Mack es el running back principal.

Ravens vs Chargers

El otro duelo de la AFC enfrentará a Baltimore Ravens (10-6) y Los Angeles Chargers (12-4), el domingo a las 19.05. El factor campo es para los cuervos gracias a su agónico título en la División Norte. Los de California tienen mejor balance, pero no pudieron con los exhuberantes Kansas City Chiefs en la AFC Oeste y se han visto abocados a jugar esta eliminatoria.

La de Baltimore es una de las mejores defensas del torneo, concediendo solo 293 yardas por choque. Bien lo saben los Chargers, que la sufrieron hace escasamente dos semanas en su campo. Llevaban tres años sin verse las caras y los Ravens se impusieron 10-22.

Lo hicieron dirigidos por el quaterback debutante Lamar Jackson, que le ha comido la tostada al legendario Joe Flacco, titular desde 2008. Con Flacco en el campo el balance era de 4-5, y con Jackson –que ofrece un estilo mucho más dinámico– la racha ha sido de seis victorias y una única derrota.

Los Chargers suelen ser bastante irregulares, capaces de dejar escapar con un par de errores groseros o decisiones desafortunadas un triunfo que ya tenían en el bolsillo. Sus posibilidades de victoria pasan en gran medida por la capacidad de su QB Phillip Rivers para superar el muro que construirán los de la bahía de Chesapeake.

Chiefs y Patriots esperan

A los vencedores de estas eliminatorias les esperan  en semifinales de Conferencia Kansas City Chiefs (12-4) y New England Patriots (11-5). En Kansas han gozado con la explosión de Patrick Mahomes. Tras su testimonial debut en 2017, este curso le han entregado las riendas del equipo, y el chaval se ha salido con más de 5.000 yardas y 50 TD de pase, de largo el mejor asistente de la NFL.

Pero no todo ha sido de color de rosa para el ataque más prolífico (35,3 puntos por encuentro). Sus opciones, sobre todo del juego de carrera, se han visto muy mermadas tras el despido de Kareem Hunt. El joven running back fue cortado de manera fulminante a finales de noviembre después de que se publicara un vídeo en el que se ve cómo agrede a una mujer con la que mantiene una discusión en el pasillo de un hotel. La responsabilidad de anotar recae ahora en dos valores seguros como el receptor Tyreek Hill y en el tight end Travis Kelce.  

New England Patriots no da tanto miedo como en temporadas anteriores, pero ya sabemos cómo se las gastan cuando llega la hora de la verdad. Han vuelto a ganar con comodidad la Conferencia Este, pero ni Miami, ni Buffalo ni New York Jets se lo ponen especialmente complicado.

Bill Bellichick trató de sacarse otro conejo de la chistera con el fichaje del receptor Josh Gordon, talentoso pero con un turbulento historial de suspensiones por consumo de drogas. La apuesta no salió bien y el ex de Cleveland Browns fue apartado el pasado diciembre «por violar los términos de su reinstalación condicional de acuerdo a las políticas y programa de abuso de susstancias».

La magia del incombustible Tom Brady –cumplirá 42 primaveras en marzo– y la polivalencia de hombres como White o Edelman son las credenciales de los de Boston, vigentes subcampeones.

Cowboys vs Seahawks

Por el otro lado del cuadro, en la NFC, abren las hostilidades Dallas Cowboys (10-6) y Seattle Seahawks (10-6), en la madrugada del sábado al domingo (2.15). En los Cowboys la rueda a seguir es la de Zeke Elliot. Si el potente running back no consigue huecos para correr, su equipo sufre. No en vano suma 2.000 yardas ganadas.

El quaterback Dak Prescott no duda en correr cuando está en la red zone, y cuenta además con un activo ramillete de receptores: Beasley, Cooper, Gallup, Jarwin…

En la trinchera de enfrente se topará con otro equipo que aboga por el juego de carrera como principal recurso, siendo Seattle el equipo más productivo de la NFL en este capítulo, con un promedio de 160 yardas por encuentro. Chris Carson es su principal estilete, aunque no el único, ya que los balones están bastante repartidos, incluyendo los que se queda el director de orquesta Russel Wilson.

Bears vs Eagles

La última plaza para la siguiente ronda que se pone en liza este fin de semana se la disputarán Chicago Bears (12-4) y Philadelphia Eagles (9-7), el domingo a las 22.40. Los Bears no enganchaban desde 2012 una temporada con más victorias que derrotas.

Lo han hecho de la mano de Matt Naggy, que a sus 40 años se estrena como entrenador principal. A pesar de ser un especialista en ataque, ha cimentado su gran campaña en la defensa, siendo, con 17,7 de media, el equipo que menos puntos encaja.

La presión sobre el quaterback rival la encabeza Khalil Mack, al que en Chicago le han pagado lo que no le quisieron dar en Oakland. Sus 12,5 sacks y 6 fumbles demuestran su valía. En la secundaria destacan las intercepciones suamadas por Kyle Fuller (7) y Eddie Jackson (6).

En el ataque las riendas han sido para Mitchell Trubisky, número 2 del draft de 2017 y al que llevan sin prisa pero sin pausa.

Philadelphia, vigente campeón, ha entrado en los play offs in extremis, gracias a su victoria sobre Washington en la última jornada y a la derrota de Minnesota, precisamente ante Chicago. Al igual que el año pasado, los del amor fraternal llegan a las eliminatorias sin su QB titular. Carson Wentz está lesionado y el puesto es para Nick Foles. Hace doce meses todo el mundo se tiraba de los pelos y Foles terminó siendo MVP de la Super Bowl. Parece complicado que se repita la historia, menos en esta NFC repleta de gallos.

Los dos mejores, Saints y Rams

Porque en semifinales de Conferencia aguardan los dos mejores equipos de la fase regular, ambos con un balance de 13-3: New Orleans Saints y Los Angeles Rams. Los Saints han sido un huracán que ha perdido fuerza en las últimas semanas. Queda saber si ha sido por desgaste o si se han dejado ir, como se vio con claridad en su último partido ante Carolina.

El cuarteto ofensivo que conforman Drew Brees (QB), Alvin Kamara y Mark Ingram (RB), y Michael Thomas (WR) ha sido una bola de demolición durante buena parte de la temporada. Si recuperan ese nivel tienen muchos boletos para disputar su segunda final, tras la que ganaron hace nueve años. Ante tanta estrella atacante su defensa parece menos brillante. Pero son el segundo equipo que menos yardas concede en el juego de carrera.

Los Rams son otra máquina de mover cadenas y anotar puntos. Promedian 32,9 por partido, solo por detrás de Kansas. Sean McVay sigue agigantando su figura como técnico, con solo 32 años. Sus prestaciones como coordinador ofensivo en Washington le abrieron las puertas para ser ‘head coach’ de los carneros. El año pasado firmó un balance de 11-5, cayendo en primera ronda ante Atlanta. Este curso se ha saltado ese escalón directamente.

Lo está haciendo con Jared Goff a los mandos, un joven quaterback que cumple su tercera campaña y al que está modelando a su gusto. Cuenta con un ramillete de receptores que se reparten las anotaciones, aunque los principales son Robert Woods y Brandin Cooks. Para el juego terrestre la referencia es Todd Gurley, 1.251 yardes y 17 touch downs en carrera.

Los angelinos cuentan además con el mejor defensa de la liga, Aaron Donald. El verano pasado se convirtió en el jugador defensivo mejor pagado de la historia, con un contrato de 135 millones de dólares por seis años. Después de 20,5 sacks –doblando casi las cifras de campañas anteriores– nadie cree que los mandamases del equipo estén arrepentidos por ese desembolso. 

Cara y cruz

Al margen de los equipos clasificados para las eliminatorias, la temporada ha dejado nombres propios destacados, de los que vamos a citar un par. La cara para el running back novato Saquon Barkley, que ha terminado la campaña con más de 2000 yardas ganadas, y 15 touch downs. Sus cifras tienen además el mérito de haber sido conseguidas en las filas de New York Giants, que ha terminado la campaña con un balance de 5 victorias y 11 derrotas.

La cruz para Mike McCarthy, despedido de Green Bay Packers en cuanto su equipo se quedó matemáticamente sin opciones de entrar en los play offs, a falta de cuatro jornadas. Era la temporada número 13 de McCarthy en el banquillo de los queseros, que ya sin él en el banquillo sumaron dos victorias y dos derrotas. Otro histórico al que ya han enseñado la puerta de salida es Marvin Lewis, que llevaba 16 campañas al frente de Cincinnati Bengals.

No obstante, el honor de ser el peor equipo de la NFL queda para Arizona Cardinals, que tendrá el número uno del draft debido a su balance de 3-13. Algo mejor, con 4-12, han terminado San Francisco 49s, New York Jets y Oakland Raiders.