Osasuna saltará este lunes a El Sadar con el Elche como adversario para tratar de reencontrarse con su mejor versión tras el complicado tramo de campeonato dejado atrás en el que los rojillos bajaron el nivel exhibido durante el comienzo. El equipo visitante llega con urgencias y tras haber anunciado este domingo su nuevo técnico, Francisco Rodríguez, quien no debutará hasta el jueves en Copa.

Jagoba Arrasate resaltaba en rueda de prensa la importancia de un choque «que puede marcar una tendencia», por lo que su equipo deberá salir con los cincos sentidos.

El técnico de Berriatua dio a entender que Ante Budimir estaba listo para relevar a sus compañeros de ataque tras haber superado la lesión que no le ha dejado exhibir el juego y los goles por los que Osasuna pagó 8 millones de euros por él este verano. Es la gran esperanza para volver a la senda del triunfo.

«Sabemos que el Elche tiene grandísimos futbolistas. Tiene mejor plantilla que el pasado año y debemos respetarla al máximo porque va a ser un partido complicado», opinaba sobre el conjunto ilicitano.

La baja de Lucas Torró dejará la puerta abierta a otro futbolista. El mediocentro vio la quinta amarilla y compañeros como Oier, Íñigo Pérez o el propio Moncayola podrían ocupar la demarcación en caso de continuar con el habitual 4-3-3. El conjunto navarro completará esta tarde el último entrenamiento antes del partido.

Osasuna va madurando con el paso de las jornadas y no debería tardar mucho en plasmar las mejorías vistas en las últimas citas. Por otro lado, el equipo tiene que poner el foco en mejorar a balón parado y los pequeños errores defensivos que no le han permitido sacar más puntos de los que refleja la clasificación.

De sumar la victoria, Osasuna sobrepasaría la barrera de los 20 puntos, un paso en firme para la consecución de una nueva permanencia que asentaría el proyecto que comanda Jagoba Arrasate, un técnico que todo hace indicar que renovará por la entidad navarra este curso.

Cambio en el banquillo y en el peor momento

El Elche afronta la visita a Iruñea en el peor momento de la temporada y tras anunciar este domingo la contratación de Francisco Rodríguez como sustituto del anterior técnico, Fran Escribá, despedido la pasada semana tras la dura derrota ante el Betis.

El equipo ilicitano, que ha enlazado seis jornadas consecutivas sin ganar con un pobre bagaje de dos puntos de dieciocho posibles, ha trabajado durante la semana a las órdenes de los preparadores físicos del club y será dirigido, no obstante, este lunes desde el banquillo por Sergio Mantecón, secretario técnico, y Pablo Masunovich, técnico del club, que han trabajado hasta el momento al frente del equipo.

A pesar del mal momento del equipo y de la improvisación con la que ha actuado el club durante la semana, la plantilla, arengada por el propietario de la entidad, el argentino Christian Bragarnik, pretende reivindicarse con un resultado positivo que permita iniciar la nueva era con optimismo.

El conjunto ilicitano cuenta con la baja del central Pedro Bigas, quien sufre una lesión en el gemelo. Además son dudas el defensa Josema Sánchez y el centrocampista argentino Javier Pastore.

La posible alineación del Elche es una incógnita, ya que todas las sesiones preparatorias del equipo se han celebrado a puerta cerrada, aunque es posible que tengan su oportunidad algunos de los jugadores que apenas contaban para el anterior preparador.

Los argentinos Iván Marcone, en el medio campo, y el delantero Darío Benedetto, pueden tener la opción de regresar al equipo inicial, así como Josan en la banda derecha y Diego González en el centro de la zaga.