El PNV está empeñado en afianzar el tráfico de cruceros en Getxo al tiempo que trata de resolver la crisis abierta por una nefasta gestión del puerto deportivo, con la mayoría de los negocios cerrados y cada vez con menos amarristas en sus pantalanes.

En ese contexto, poco después de que el consejo de Getxoko Kirol Portua haya aceptado este lunes la renuncia de la concesionaria, el presidente de la Autoridad Portuaria de Bilbo (APB), Iván Jiménez, y la máxima responsable de esta sociedad pública, la alcaldesa Amaia Agirre, han anunciado que la APB abre «un proceso de escucha y participación para lograr un nuevo modelo de puerto deportivo de Getxo y terminal de cruceros más moderno, sostenible y compartido».

La hoja de ruta por la que apuesta el PNV pasa por mantener la actividad del puerto deportivo y que sea la propia sociedad pública quien asuma la gestión con la vista puesta, «a largo plazo», en un «nuevo modelo» donde ambas actividades, la del puerto deportivo y la terminal de cruceros, sean lideradas por la APB.

Los jeltzales están solos en este proyecto estratégico, como ha quedado de manifiesto por distintas declaraciones de EH Bildu, PP y PSE. En el Consejo de Administración de Getxoko Kirol Portua, los representantes de estas tres fuerzas políticas se han abstenido al querer el PNV que se votaran conjuntamente los puntos referidos a la resolución de la concesión del puerto deportivo con otros relacionados con el futuro de la infraestructura.

Es más, al PSE no le gusta cómo está actuando el PNV tanto en la gestión del puerto deportivo como en su empeño por construir un hotel que afiance el tráfico de cruceros. Le acusa de «falta de transparencia», al igual que EH Bildu, quien en el Consejo ha dicho que «queda acreditada la voluntad oscurantista de la presidencia y la dirección de la sociedad».

«Se dirá que aquí no se habla del hotel, pero el hotel, o mejor dicho la ‘propuesta de modificación puntual del plan especial de ordenación de la zona de servicio del Puerto de Bilbao, Relativa al Puerto Deportivo de Getxo’ y que pretende acogerse al artículo 72.4 del Texto Refundido de la Ley de Puertos del Estado y de la Marina Mercante y que busca la construcción de un hotel, sobrevuela sobre todo este proceso», ha sostenido Ibon Rodríguez, consejero de EH Bildu en Getxoko Kirol Portua.

«Nuestro convencimiento es que se ha actuado en esta sociedad y respecto de algunos de los consejeros con un oscurantismo consciente y se ha tratado en todo momento de ocultar la realidad», ha denunciado.

Rodríguez ha reclamado que se depuren responsabilidades en la gestión y ha señalado al director, Álvaro Cerezo. Ha pedido su dimisión. «Desde su entrada los gastos salariales han pasado de 56.800 euros en 2016 a 104.000 en 2025 y desgraciadamente no parece que la apuesta haya sido exitosa a la vista de la situación en la que nos encontramos», se ha quejado.

Juanma González, el vocal del PSE, ha considerado «llamativo» que la alcaldesa y el presidente de la Autoridad Portuaria fuesen a presentar un «master plan» sobre el futuro del puerto, sin dar previamente esa información al Consejo de Getxoko Kirol Portua.

En ese contexto de crisis en el puerto deportivo, pendientes de que se resuelva el plan especial para encajar un hotel con 190 habitaciones, algo que en la actualidad no es legal, el presidente de la Autoridad Portuaria ha informado en una comparecencia en la Casa de Náufragos de Arriluze que trabaja «en el diseño de un nuevo modelo de gestión sostenible y participativo para el puerto deportivo de Getxo y terminal de cruceros, alineado con la estrategia metropolitana y con la Agenda Horizonte 2030 para el Desarrollo Sostenible de Naciones Unidas, contando con el apoyo del secretariado de la Coalición Local 2030 de las Naciones Unidas para la implementación y desarrollo de los objetivos de desarrollo sostenible y convertirlo en un ejemplo para otros puertos del mundo».

En dos años

En ese proceso, ha dicho Iván Jiménez, participará «activamente» el Ayuntamiento de Getxo y otras organizaciones, «con el objetivo de elaborar, de forma colectiva, el mejor proyecto posible para su futuro». La previsión es poder contar con el proyecto en el plazo de dos años.

El responsable de la APB ha expuesto que «el nuevo modelo de puerto se configura como un espacio abierto, moderno, sostenible y plenamente integrado en la vida urbana de Getxo». Además, buscará reforzar «su papel como motor económico, portuario y social, y lo hará desde la cooperación y el diálogo».

«Este proceso se inscribe en la transformación del área metropolitana de Bilbao a lo largo de las últimas décadas», ha apuntado Jiménez.