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Homenaje a Txiki en el cementerio barcelonés de Collserola, donde fue ejecutado

Juan Paredes ‘Txiki’ ha sido homenajeado por colectivos antifascistas, familiares y amigos en el cementerio barcelonés de Collserola, donde fue ejecutado y ha finalizado una marcha que ha partido de la plaza del Ayuntamiento de Cerdanyola del Vallès.

Acto en memoria de Juan Paredes Txiki, en el cementerio de Collserola, lugar en el que fue ejecutado. (CUP Països Catalans X)

Colectivos antifascistas, familiares y amigos han rendido este domingo un homenaje a Juan Paredes ‘Txiki’ uno de los últimos fusilados del franquismo, en el cementerio barcelonés de Collserola, donde fue ejecutado.

Ayer sábado se cumplieron 50 años de las cinco últimas ejecuciones de la dictadura franquista, en las que fueron fusilados Ánjel Otaegi en Burgos y Juan Paredes en dicho cementerio de Collserola, además de tres militantes del FRAP –Xosé Humberto Baena, José Luis Sánchez-Bravo y Ramón García Sanz–, los tres en un campo de tiro militar en Hoyo de Manzanares (Madrid).

Los actos de conmemoración se han celebrado los días 25, 26, 27 y 28 de setiembre, en Barcelona, Iruñea, Cerdanyola y Zarautz, con diversos eventos como mesas redondas y homenajes.

Este domingo ha tenido lugar una marcha a pie entre la plaza del Ayuntamiento de Cerdanyola del Vallès y el cementerio de Collserola, donde fue ejecutado Txiki, y posteriormente los asistentes han participado en un almuerzo popular.

El hermano de Txiki, Diego Paredes, ha recordado, en declaraciones a TV3, que desde su detención «esperaba algo así, porque era un extremeño que estaba en una organización independentista vasca», y ha asegurado: «El régimen quería dar una lección».

La abogada Magda Oranich, que asistió a Txiki, ha explicado que Franco y su entorno querían «aplicar la pena de muerte en diferentes lugares del Estado y todos debían ser el mismo día y a la misma hora».

Con relación a estos hechos, el grupo parlamentario de Comuns ha registrado una propuesta de resolución en el Parlament en la que reclama un espacio de memoria dedicado a los últimos fusilados del franquismo en el cementerio de Collserola.