Según los datos aportados este martes en el balance del Festival Flamenco On Fire, 4.700 personas han acudido a espectáculos de pago dentro de la programación del festival y otros 2.800 asistentes lo han hecho a las actividades gratuitas del programa ‘Calles, Balcones y Patios’.

La concejal de Cultura del Ayuntamiento de Iruñea, María García-Barberena, ha señalado la satisfacción de la institución por la celebración de la séptima edición «a pesar de las condiciones contrarias» por la pandemia. Ha alabado su celebración también por ser, según ha afirmado, «el evento, después de Sanfermines, que más atracción turística genera a la ciudad de Pamplona», al tiempo que ha señalado el éxito suscitado en asistencia ya que «las localidades e invitaciones se han agotado» en prácticamente todos los espectáculos.

Por último, ha lamentado que las inclemencias meteorológicas provocaran la suspensión del espectáculo previsto para el sábado 29 de agosto con la actuación de La Macanita, Los Voluble y Raúl Cantizano.

La gerente de la Fundación Baluarte, María Antonia Rodríguez, ha recordado que esta institución apoya desde su inicio al festival flamenco en materia de financiación y ha destacado «el seguimiento escrupuloso de las medidas de seguridad» tanto delante como en el escenario.

Desde NICDO, su director gerente, Javier Lacunza, ha señalado el despliegue realizado en la retransmisión en streaming del festival, que «ha tenido espectadores en lugares como Japón o Argentina», al tiempo que ha reseñado que se trata de una producción realizada con profesionales navarros.

Sobre el alcance de retransmisiones en directo del Festival ha destacado «la calidad muy elevada» desarrollada por el festival y ha llamado a valorar «no tanto el volumen de interacción que ha habido sino la calidad desplegada».

En representación de las Bardenas, José María Agramonte ha agradecido que el festival este año haya trasladado parte de su programación a la zona y ha valorado «muy positivamente» que el Teatro Gaztambide de Tutera cediera su espacio para el desarrollo de la apertura con el concierto de Miguel Poveda el 26 de agosto ya que «de otro modo, hubiera sido difícil su celebración dadas las condiciones».

Desde la organización del festival, Arturo Fernández ha destacado la implementación de las directrices en relación con la COVID «como muy positiva» ya que «no hay conocimiento de ninguna incidencia durante la celebración ni posterior al festival».

En este sentido, ha señalado que la organización puso a disposición medios habilitados para facilitar a las personas asistentes la comunicación de cualquier tipo de incidencia, un modelo que considera, junto al resto de protocolo ‘On fire responsable’ «un granito de arena» en un protocolo que puede seguir desarrollándose.

Asimismo, los responsables del festival han anunciado que Flamenco on Fire tendrá edición el próximo año, su octava, y se celebrará previsiblemente «a partir del 23 de agosto de 2021». Arturo Fernández y Juan Casero, organizadores del festival, han señalado que «es imposible entrar ahora en formatos» aunque han precisado que «se espera y se desea que la situación de pandemia» finalice y se llegue a una situación «que permita volver a disfrutar del Flamenco on Fire como hasta la fecha».

Han precisado que se espera la llegada de la edición de 2021, para la que han adelantado que hay «dos nombres preconfirmados» aunque no han deslizado quiénes serán. Sin embargo, sí han adelantado que desde el festival quieren volver a contar el próximo año con La Macanita y Los Volubles tras la cancelación de su actuación el pasado sábado por la lluvia ya que «les pilló en el camerino y fue una faena».

Por último, han anunciado que las entradas adquiridas serán devueltas en su totalidad. Han precisado que los asistentes recibirán en su correo electrónico información al respecto y que la devolución del importe de las entradas se devolverá de manera íntegra «en el plazo de 3 o 4 días».