Imanol CARRILLO
DONOSTIA

Lakua ofrece colaboración a Arcelor en las inversiones necesarias

El Ejecutivo Urkullu presentó ayer al comité de Arcelor Zumarraga un plan como alternativa al cese parcial de actividad en la factoría en el que se compromete a colaborar con la multinacional en las «necesarias inversiones y aplicación de nuevas tecnologías que permitan a la planta ser competitiva y diversificar sus productos». En caso de ser precisa la reubicación de trabajadores, propone un plan social con medidas no traumáticas.

Las decisiones tomadas por Arcelor Mittal en Sestao y Zumarraga parecen haber noqueado al Gobierno Urkullu, al que los sindicatos y trabajadores han criticado duramente por su gestión de la situación. Ayer, en una jornada maratoniana, Lakua presentó un plan de inversiones en el que «lleva trabajando desde hace tiempo» para la actividad industrial del acero y que, según indicó, ha elaborado para Arcelor Zumarraga «como alternativa» al cese parcial de actividad decidido por la multinacional india.

La consejera de Desarrollo Económico y Competitividad, Arantza Tapia, llevó el plan al Consejo de Gobierno antes de reunirse en Donostia con el comité, mientras que varias horas más tarde hizo lo propio en Zumarraga con representantes de la Diputación y ayuntamientos afectados por la actividad industrial de la planta (Zumarraga, Urretxu, Legazpi y Ezkio-Itsaso).

Una vez mantenida la «lealtad» con los 325 trabajadores de Arcelor Zumarraga, el departamento de Tapia remitió una nota detallando el plan.

En él se señala que Lakua está dispuesto a colaborar con la multinacional «en las necesarias inversiones y aplicación de nuevas tecnologías que permitan a la planta ser competitiva y diversificar sus productos».

Días atrás Lakua criticó que Arcelor no había invertido lo suficiente en esta factoría de Zumarraga. Recordó, «por activa y por pasiva», su disconformidad con la decisión empresarial y analizó las posibles alternativas «con dos objetivos claros», uno de ellos la continuidad de la actividad y el mantenimiento del empleo industrial en la comarca. El segundo objetivo es explorar un escenario en el que haya «cabida para la participación institucional y de sindicatos, lejos del escenario actual en el que cualquier decisión recae exclusivamente en la empresa».

La iniciativa de Lakua propone un trabajo conjunto de las fábricas de Arcelor Mittal de Zumarraga y Bergara para, entre otras cosas, la «mejora de la calidad y desarrollo de nuevos productos y mercados», así como de «la eficiencia en procesos e instalaciones, con especial incidencia en eficiencia energética y mantenimiento preventivo y predictivo». Otro de los objetivos señalados es el aumento de la producción de aceros destinados al mercado de aplicaciones especiales y de automoción.

«Plan social»

Lakua admite la posibilidad de que este plan no evite un ajuste parcial y una reubicación de sus trabajadores, aunque considera que no tan elevada como el actualmente previsto. Como alternativa, propone realizar un plan social que considere «medidas no traumáticas de prejubilaciones, bajas incentivadas y traslados pactados con la representación de los trabajadores».

Llegado este caso, la propuesta de Lakua considera necesario «un plan de reindustrialización» de la zona de Urola Garaia, que se iniciaría con la reubicación de algunos trabajadores en otras empresas de la zona y la «atracción de nuevos proyectos industriales», tratando de «diversificar el tejido productivo».

Señala, además, que se definiría el conjunto de medidas que las administraciones pondrán a disposición del proyecto y se procuraría el asesoramiento formativo, industrial y financiero (incluida la atracción de recursos) necesario para su implementación. Para este fin, considera que Arcelor debería poner «las instalaciones de la actual planta y los recursos económicos previstos inicialmente para llevar a cabo el posible ajuste».

El plan presentado también contempla una «alternativa extrema» en caso de que fuera necesaria una última fase. En este punto, plantea utilizar el Fondo Europeo de Adaptación a la Globalización para colaborar en la puesta en marcha de un plan de reindustrialización en Urola Garaia.

Paralelamente, Lakua muestra su disposición a «continuar trabajando en Europa para establecer de forma rápida y eficaz medidas ‘antidumping’» –sin mencionar el desplome de la demanda de acero que argumentó Arcelor–, reforzar el trabajo en Madrid y Bruselas para garantizar «la competitividad de los grandes consumidores de electricidad» y para que «se deje de excluir al acero» de aquellos sectores a los que «se puede apoyar de forma expresa».

Antes de conocerse el plan al detalle, el PSE también se reunió con el comité en Zumarraga para trasladarle su apoyo y pidió «más rigor» a Lakua ante «su parálisis inicial». Por su parte, el sindicato LAB mostró su sorpresa por cómo está actuando el Ejecutivo en todo este proceso y consideró que el plan «está urdido con la propia empresa».

Urkullu recibe al embajador de China en Madrid

El lehendakari Iñigo Urkullu y el embajador de China en Madrid, Lyu Fan, mantuvieron ayer por la mañana una reunión en Ajuria Enea de la que no trascendió información. El encuentro, por sí mismo, podría pasar desapercibido, como un acto protocolario más en la agenda institucional de ambos mandatarios, si no fuera porque el Gobierno de Lakua se ha mostrado muy crítico con el «dumping» chino en el sector del acero –venta por debajo del precio del mercado– después de la parada «temporal e indefinida» de la ACB de Sestao anunciada en enero y la paralización de forma parcial de la actividad de Arcelor Mittal de Zumarraga.

Desde el primer momento, el Ejecutivo de Iñigo Urkullu reclamó en Bruselas «medidas rápidas» contra estas actuaciones. Además, una delegación de Lakua acudió el 15 de febrero a la capital de Bélgica para participar en la manifestación convocada por una gran alianza de empresas (AEGIS Europe), a iniciativa de la organización Eurofer –en la que se agrupan las más importantes compañías del sector, entre ellas la propia Arcelor–, contra la competencia china.GARA