La investigación sobre el accidente de avioneta en Arbizu continúa bajo secreto de sumario, pero ayer se hizo público que hay un tercer fallecido. Quienes perdieron la vida eran los ocupantes de la avioentea y, según todos los indicios, se trata de dos hombres y una mujer del Estado francés, aunque se siguen cotejando pruebas. La avioneta se estrelló el jueves por la tarde en una de las calles del pueblo, después de que hubiera chocado contra un buitre, según confimaron los testigos.

Visto cómo se desarrolló el suceso en pleno casco urbano, resulta sorprendente que no haya que lamentar otras víctimas. El aparato golpeó contra los tejados de las casas, entró por una calleja perpendicular a la calle Mayor, cruzó esta calle principal de lado a lado y se estrelló entre dos viviendas, rompiendo una tapia hasta detenerse al chocar con un pequeño tractor aparcado entre dos de las viviendas de la entrada al pueblo. Las casas de la calleja por la que se adentró sufrieron daños en las fachadas por las alas de la avioneta, ya que la calle era más estrecha que el aparato.

Ayer, la alcaldesa de la localidad, Karmele Marañon, detallaba que hay daños en «cinco o seis casas, varios coches, más alguna farola». No obstante se felicitaba porque no hubo daños personales, si bien el jueves se atendió a varios vecinos por el impacto emocional del suceso. «La sensación es casi de optimismo, al pensar lo que podía haber sido», comentó Marañon, que recordó además que había muchos niños jugando a escasos metros del lugar donde se estrelló la avioneta.

Según los testigos presenciales, el aparato chocó contra un buitre a la altura de la borda de San Juan, entre el pueblo y la autovía, y a apenas unos centenares de metros del casco urbano. Desde ahí, se precipitó sobre Arbizu, golpeando en varios tejados hasta entrar por una de las calles y chocar contra el suelo.