Dabid LAZKANOITURBURU

El ISIS trata de frustrar la ofensiva militar en la ciudad de Falujah

Tal y como se presagiaba, la batalla por Falujah se anuncia dura. A la temeridad de los yihadistas del ISIS se suman los miles de civiles atrapados y el temor a las exacciones de las milicias chiíes pro-iraníes, en la periferia pero prestas al combate en caso de dificultades.

La batalla se anuncia larga y difícil, ya que el Estado Islámico está bien anclado en la conocida como «la ciudad de las mezquitas», situada en el eje de las rutas que llevan a Arabia Saudí y a a Jordania y una de las primeras ciudades iraquíes que importó la ideología rigorista wahabí.

La ciudad, a tan solo 50 kilómetros al oeste de Bagdad y segunda en importancia del califato tras Mosul, fue conquistada por el ISIS ya en enero de 2014

Que la batalla será dura quedó claro tras las primeras horas del asalto de la unidad de élite «antiterrorista» del Ejército iraquí el pasado lunes y con la cobertura aérea de una coalición internacional dirigida por EEUU.

Así, tras entrar en la ciudad de Falujah por tres flancos, los soldados iraquíes solo pudieron progresar significativamente desde el lado sur, hasta llegar al barrio de Naimiyah.

No obstante, y tal y como reconoció el comandante de la operación de asalto, «un centenar de yihadistas fuertemente armados» lanzaron un contraataque que el Ejército iraquí habría logrado frenar, aseguró el general Abdelwahab al-Saadi. Oficiales iraquíes aseguraron que el apoyo aéreo de la coalición internacional fue crucial para atajar la contraofensiva en Naimiyah y para permitir la progresión del Ejército iraquí.

La ofensiva, preparada desde hace meses, se ve asimismo doficultada por el hecho de que decenas de miles de civiles están atrapados en la ciudad. Uno de ellos señaló por teléfono a AFP que temen la reacción del ISIS en caso de que la ofensiva fracase. «Cada vez nos tratan peor, están indignados porque la gente no les apoya e insultan a la gente llamándoles traidores», añadió Abu Mohamed al-Dulaimi.

Entre dos fuegos

El ISIS entró en enero de 2014 a Falujah sin resistencia alguna. Y es que la ciudad, escenario entonces de la enésima revuelta contra Bagdad, ha sido y es un bastión no solo contra la ocupación sino contra el Gobierno chií pro-iraní instalado en la capital tras la invasión .

Pese a contar con una importante presencia de predicadores salafistas, algunos de ellos encarcelados por el antiguo régimen, Saddam Hussein benefició con sus políticas sectarias pro-suníes a esta ciudad.

El sesgo islamista que Saddam dio a los últimos años de su gestión, en vísperas de la ocupación, impulsaría a la postre, ironías del destino, la conversión de la ciudad en el germen del movimiento que a la postre fue bautizado como Estado Islámico y que es una amalgama entre brigadistas yihadistas y restos del partido de Saddam (el Baath) y su Ejército.

En estas circunstancias, la presencia de las milicias chiíes de Haseed al-Shaabi en el asalto sobre Falujah supone un factor que puede decidir el éxito de la operación militar. Y es que hay dudas de que el Ejército iraquí tenga capacidad para someter a una ciudad («la nueva Vietnam») que supuso en 2003 y 2004 un quebradero de cabeza para el Ejército estadounidense.

No obstante, ese éxito militar podría convertirse en una derrota política, toda vez que las tribus y los habitantes suníes no están dispuestos a sufrir no ya su gobierno sino sus excesos, que quedaron patentes con las exacciones que las milicias chiíes cometieron contra la población civil en Tikrit. Al punto de que Bagdad les prohibió que participaran en la operación contra Ramadi, capital de la provincia de Al-Anbar.

Por otro lado, las fuerzas kurdas (peshmergas) intentaban consolidar sus posiciones a 15 kilómetros al este de Mosul frente a contraofensivas en varios frentes del Estado Islámico.

Encarnizados combates a varias bandas contra el ISIS en Siria

La coalición entre milicias kurdas y rebeldes árabes de la Fuerzas Democráticas Sirias (FDS) trataba de mantener sus posiciones en el noroeste de Raqa y lanzar el asalto sobre Tabqa para sitiar la capital siria del ISIS.

Los yihadistas oponían dura resistencia después de que el FSD hubiera liberado 13 localidades y los combates eran encarnizados.

Igualmente duros eran los combates de los rebeldes sirios para sacudirse la ofensiva del ISIS en la provincia de Alepo. Los rebeldes lanzaron un ataque para aliviar la presión sobre Azaz y Marea pero fueron parados en seco por un kamikaze del ISIS. GARA

El OSDH acusa a Rusia de matar a 23 civiles en un ataque en Idleb

El opositor Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH) aseguró que 23 civiles, de ellos cinco menores, murieron a última hora del lunes en un bombardeo ruso contra Idleb, capital provincial controlada por Jaish al-Fatah, una coalición entre grupos rebeldes islamistas-salafistas con el Frente al-Nosra (Al &dcOne;Qaeda). Rusia negó esta información y acusó al OSDH, que asegura contar con una vasta red de informadores sobre el terreno, de difundir «cuentos de terror». Moscú advirtió, eso sí, a los grupos rebeldes del fin esta semana de la tregua para que definitivamente se desliguen del Frente Al Nosra . GARA