María SUÁREZ
Londres
REFERÉNDUM SOBRE LA UE EN GRAN BRETAñA

Los indecisos, la llave del futuro del Reino Unido

Las corrientes por el «Brexit» y por el «Remain» se afanan y echan el resto para conseguir el voto de los indecisos en las últimas horas de campaña previas al referéndum en el que la ciudadanía decidirá el futuro de Reino Unido y de la Unión Europea.

«Iam not sure how to vote». Es la respuesta que parte de la población está dando a las empresas de sondeos que desde hace meses trabajan sin descanso para elaborar las encuestas que acaparan luego los titulares sobre el referéndum sobre la permanencia de Reino Unido en la UE que pone tan nerviosos a quienes lideran ambas campañas.

En las encuestas de calle, gran parte de la ciudadanía británica critica que las corrientes por el «Leave» y por el «Remain» no han sido claras en estas semanas de campaña y, de hecho, los analistas coinciden en la «guerra sucia» que se ha venido disputando entre ambos bandos, con las amenazas y la incertidumbre como arma para intentar convencer a la ciudadanía de una opción u otra.

Recientemente, el profesor de la London School of Economics Michael Bruter aseguraba que «un 30 % del electorado cambia de opinión sobre el sentido de su voto en la semana previa a la cita con las urnas, y la mitad de ellos lo hace el mismo día de la votación». Por eso las encuestas no son del todo exactas, aunque no hay duda de que ayudan a realizar infinitas especulaciones.

Como lo más cercano al desenlace del referéndum con lo que contamos son los sondeos, se sigue especulando, aunque nadie se aventura a apostar por ningún resultado con claridad.

Las diferentes encuestas realizadas por distintas empresas de opinión (Yougov, IPSOS, Survation...) muestran lo que podríamos calificar casi casi como un empate técnico, con uno, dos, tres o cuatro puntos de diferencia entre una corriente y otra, dependiendo del día y del momento. Lo que parece claro por tanto, es que ambas corrientes necesitan –y buscan– el voto indeciso.

Pero, ¿quiénes son los indecisos en este referéndum? Y, sobre todo, ¿cuántos son y qué poder pueden llegar a tener? Las últimas encuestas los sitúan en alrededor del 10 % de la población, aunque podrían ser más. «Muchas de las personas que participan en las encuestas y a las que se les pregunta si han decidido su voto responden que sí, aunque no significa que estén seguros de ello al cien por cien, lo que significa que el porcentaje de población indecisa podría ser mayor», explica a GARA John Bartle, doctor en Ciencias Políticas y profesor de la Universidad de Essex.

Cambios de opinión

Bartle destaca además otro segmento de votantes que podría desequilibrar – o equilibrar– la balanza de uno u otro lado. «Es cierto que los votantes más comprometidos políticamente tienen decidido qué casilla tacharán el día de la cita con las urnas, incluso antes del inicio de la campaña, pero hay otros votantes que, habiéndose decantado por una opción, podrían cambiar su opinión hacia otra», explica.

Un ejemplo mediático de estos días ha sido el de la baronesa Warsi, exdirigente del Partido Conservador que había hecho campaña por el abandono de la Unión Europea. Recientemente y de manera repentina, anunció que había cambiado su sentido de voto y que prefiere apostar por la permanencia. En su caso, sus razones radican en «la campaña xenófoba de algunos» de los que apoyan el abandono de la UE, como el líder del partido ultraderechista UKIP Nigel Farage (que no forma parte de la campaña oficial «Vote Leave» pero que apoya el abandono de la UE con tesis basadas en ideologías racistas).

Por eso, los últimos movimientos de ambas corrientes también persiguen conseguir el cambio de opinión de parte de la población. Y aún hay más. «Cuando la persona no tiene decidido qué votar, es posible que ni siquiera se acerque a las urnas el día del referéndum», asegura a GARA Steven Fielding, profesor de Historia Política de la Universidad de Nottingham y experto en el Partido Laborista.

Por esta razón, los últimos mensajes que se escuchan también se centran en llamar a acudir a las urnas. Y aquí tiene mucho que decir el Partido Laborista. Steven Fielding reconoce que hasta hace poco existían votantes de izquierdas «que no conocían cuál era la postura del laborismo con respecto al referéndum, sobre todo entre la clase trabajadora con menos poder económico». Y precisamente son esas personas quienes podrían hacer que el resultado pesara más de un lado que de otro.

Puerta a puerta

Por ello, durante el día de mañana, miembros del Partido Laborista acudirán puerta a puerta por diferentes distritos electorales para informar a la ciudadanía de la posición laborista y para destacar la importancia de su paso por las urnas.

«No solo los discursos de los jefes de filas son importantes, también es esencial el trabajo de campo para convencer a los indecisos», asegura Fielding. Pero en la cúpula de la formación también se trabaja en estos últimos días, con más apariciones de las habituales en los medios de comunicación de Jeremy Corbyn reconociendo que, aunque no es un gran fan de la Unión Europea, definitivamente el Reino Unido está en mejor situación y cuenta con más margen de maniobra dentro que fuera de ella.

La muerte de la diputada laborista Jo Cox a manos de un hombre vinculado a la extrema derecha también podría afectar a la hora de tomar una decisión a favor de la permanencia.

Sin embargo, para John Bartle, «parte de ese núcleo de población indecisa, trabajadora y con menos nivel económico considera la inmigración europea cualificada como una amenaza, por ello pueden decantarse por el abandono de la UE», a pesar de las insistencias de su partido para que voten lo contrario.

Evidentemente, también existen otros factores que no se pueden controlar y que afectarán de una u otra manera a la participación de la masa indecisa. Uno de ellos es el tiempo. Una jornada lluviosa, nada fuera de lo normal en esta época en Reino Unido, podría frenar la motivación de aquellos que no han decidido la opción a la que votarán.

Lo que parece claro es que las consecuencias del referéndum irán más allá del resultado que conozcamos el viernes. Bartle se aventura a adelantar una situación compleja en el futuro para la formación de Jeremy Corbyn. «Parte de las bases del Partido Laborista, al conocer que la formación a la que suelen votar tradicionalmente apuesta por la permanencia en la UE, podría trasladar su votos a formaciones como UKIP, que puede aliviar su desconfianza en la inmigración europea».

 

La prensa británica toma partido y se convierte en parte activa de la campaña

El nerviosismo ante lo apurado de las encuestas también ha llegado a los medios de comunicación. Al principio más tímidamente; sin embargo desde hace días los diarios británicos son parte activa de la campaña y no dudan en pedir claramente el voto por una u otra opción a sus lectores. El tabloide “The Sun”, el diario con más lectores en Reino Unido (aproximadamente 1,7 millones cada día ), fue el primero en apoyar abiertamente el Brexit con su famosa portada en la que se leía «BeLEAVE in Britain», un juego de palabras con las que se pedía abandonar la UE y creer en el Reino Unido. A partir de entonces prácticamente todos los diarios han tomado posiciones. “The Sun” continúa con una campaña agresiva y con la inmigración como foco de atención, al igual que otro de los tabloides más conocidos, “The Daily Mail”. En la misma línea, “The Telegraph”, diario conservador donde Boris Johnson trabajó durante su estancia como corresponsal en Bruselas, se alinea con las tesis de su ex empleado y considera que a Reino Unido «le espera un mundo de oportunidades fuera de la UE», como apuntaba en su editorial recientemente. Una idea en la que se incidía en su última edición dominical “The Sunday Telegraph”, centrándose en la necesidad de limitar el movimiento de los trabajadores comunitarios.

Los diarios no sensacionalistas han tomado posición por la permanencia. Llama la atención el caso de “The Times”, para el que la permanencia en la UE es la mejor opción y por el contrario, su edición dominical, “The Sunday Times” apuesta por la ruptura. La explicación se puede encontrar en que ambas publicaciones –junto con “The Sun”– son propiedad del magnate Rupert Murdoch.

Por lo demás, el “The Guardian”, el periódico de referencia para la izquierda británica, ha pedido abiertamente el voto por la permanencia esta misma semana en su portada, «Vote to remain» «Contra una nación dividida», se podía leer. Su edición dominical “The Observer” sigue la misma línea. En prensa salmón, “Financial Times” titula una sección como «Britain in Europe» (Gran Bretaña en Europa) y se centra en la imposibilidad de volver atrás si la ciudadanía vota por abandonar la UE. El periódico (ahora digital) “The Independent” también se ha posicionado a favor de la permanencia con su editorial «La opción correcta es la de permanecer».

“The Mirror” es el único tabloide que apuesta por la permanencia. Uno de los argumentos esgrimidos es que el precio de la cesta de la compra ascendería 580 libras anuales (más de 620 euros) si Reino Unido abandona la UE.GARA