Iñaki VIGOR
IRUÑEA

Oberena se encargará de lanzar el cohete de las peñas tras el «Pobre de mí»

El 7 de julio de 1941 los miembros de la peña Oberena recorrieron por primera vez las calles de Iruñea, portando una pancarta de Nicolás Ardanaz y bailando al ritmo marcado por un grupo de músicos de Barasoain que había reclutado Manuel Turrillas. En honor a estos 75 años de andadura, Oberena lanzará el primer cohete tras el «Pobre de mí».

A las doce en punto de esta noche se anunciará desde el balcón del Ayuntamiento que los sanfermines han terminado, pero como la Plaza Consistorial se queda pequeña para acoger a la multitud de personas que suelen acudir a este acto, las peñas de Iruñea hacen su propio ‘‘Pobre de mí’’ en la Plaza del Castillo.

El primer cohete anuncia que las fiestas oficiales han concluido, y luego siguen diez minutos en los que las charangas de todas las peñas interpretan las canciones habituales del fin de los sanfermines. Pero luego suena un segundo cohete que anuncia que las peñas comienzan su recorrido por las calles de la ciudad para prolongar la fiesta unas cuantas horas más.

Se trata también de una forma de autoorganización de las propias peñas para evitar que todas inicien su andadura desde la Plaza del Castillo por el mismo lugar y se formen grandes aglomeraciones. Así, cada peña tiene asignada una «salida» determinada, aunque más tarde realicen sus recorridos por donde les apetezca.

Ese segundo cohete se instauró hace tres ediciones, y tuvo el honor de lanzarlo el actual presidente de la Federación de Peñas, Mikel Donlo. El del año pasado lo lanzó un representante de la peña La Jarana, como reconocimiento a sus 75 años de vida, y en esta ocasión lo hará una representación de la peña Oberena, que también ha llegado a su 75 cumpleaños.

Probablemente prenderá la mecha su presidenta, Ruth González, en nombre de los 240 socios de la peña grande y los 60 de la txiki. En total, 300 miembros que realizan actividades lúdicas y culturales no solo en sanfermines, sino a lo largo de todo el año, entre las que destacan las realizadas por su grupo de dantzas, que también cumple 75 años y que ha paseado el nombre de Oberena por multitud de localidades.

En el cogollo de la fiesta

Oberena «es la peña de más alegría», como dice la letra de su veterano himno. Históricamente ha tenido que deambular por diversos locales de la ciudad, hasta que en febrero de 2010 se asentó en su actual sede del número 82 de la calle Jarauta. «Con este local se ha conseguido estrechar relaciones entre los miembros de la peña e impulsar actividades durante todo el año», explica la presidenta de Oberena, al tiempo que constata que el relevo generacional de la peña «está asegurado».

Atrás quedan 75 años de actividades, desde que esta peña se gestase en el número 40 de la calle Zapatería en 1940, aunque no tuvo su bautismo sanferminero hasta 1941. En todo este tiempo ha marcado algunos hitos que exhiben con orgullo: no ha faltado ni un solo año a su cita sanferminera; fue el primer club de montaña que se puso en marcha en Nafarroa; creó la primera escuela de txistularis de Iruñea, que fue la única durante años; de su escuela han salido pelotaris como Beloki, Txiki y Tejada, que consiguieron medallas olímpicas, y unos cuantos futbolistas de gran nivel, y además ha organizado uno de los torneos de ajedrez más importantes del Estado.

El nombre elegido, ‘‘Oberena’’, no deja dudas sobre el carácter euskaldun de sus miembros fundadores ni tampoco sobre sus aspiraciones: ser el mejor, la mejor o lo mejor, según se interprete. Se trata de una peña que tiene unas señas de identidad propias y que cuenta nada menos que con 16 secciones deportivas y culturales, en las que participan numerosos personas tanto socias como no socias. Y terminaremos como siempre lo hacen ellos: Aupa Oberena!