«Ni diálogo ni puñetas». Así de contundente se mostró Francesc Homs, portavoz de PDECat, después de que el Congreso español aprobase el suplicatorio presentado por el Tribunal Supremo español para retirarle la inmunidad y juzgarle por «prevaricación» por su responsabilidad en la consulta del 9 de noviembre de 2014. Bastaron los votos de PP, PSOE y Ciudadanos, siempre unidos cuando el asunto es Catalunya, para avalar que el exportavoz de la Generalitat sea procesado. En concreto, 248 votos a favor y 91 en contra. Ahora la pelota pasa al tejado del Alto Tribunal que es el que tiene que fijar fecha para un proceso que podría terminar con la inhabilitación de Homs.

Con la señal de televisión del Congreso español apuntando a los frescos del techo del hemiciclo por tratarse de un debate a puerta cerrada, el Congreso debatió sobre el suplicatorio. En principio, se plantea que esta discusión sea privada para salvaguardar la intimidad del afectado. En este caso, Homs quería luz y taquígrafos, pero los partidarios de sentarle en el banquillo lo impidieron. La contundencia en el voto no se vio a la hora de elevar la voz. Ni PP ni PSOE ni Ciudadanos tomaron la palabra para reivindicar el «sí» y únicamente intervinieron en la fijación de posición, lo que acortó los tiempos, aunque el debate se extendió durante una hora.

Poco se podía esperar del PP. Su portavoz, Leopoldo Barreda, se limitó a defender «la ley» frente al proceso soberanista. El PSOE, que había sido apelado por los contrarios a juzgar a un portavoz por colocar urnas, se aferró al argumento de que mantener el aforamiento permitía la «impunidad» de Homs. Únicamente Xavi Domènech cuestionó al bloque unionista por parte de los cuatro grandes partidos del Estado. Admitió estar «en las antípodas» del exportavoz de la Generalitat pero advirtió de que medidas como esta rompen los puentes del diálogo. «Nos tendrán enfrente», advirtió a los diputados del PP. Acto seguido tomaba la palabra Juan Carlos Girauta, portavoz de Ciudadanos. En su habitual tono exaltado, se reivindicó como catalán y terminó dedicando la mayoría de su intervención a criticar a Podemos y al 15M, afirmando que rechazar el suplicatorio era favorecer los privilegios de la clase política. Una de las estrategias de los partidarios de juzgar a Homs ha sido tratar su persecución por poner urnas como si se tratase de uno de los habituales casos de corrupción en el Estado.

Desde Euskal Herria, Aitor Esteban (PNV) consideró que el proceso catalán es un asunto político y que lo que el Estado intentaba era «matar elefantes a perdigonazos». Marian Beitialarrangoitia, por su parte, expresó el apoyo de EH Bildu a la mayoría política y social catalana, consideró que esta es una prueba de la imposibilidad de democratizar el Estado y apeló a abrir un proceso de «soberanía plena» en los territorios vascos.

Apoyo plural

Horas antes, Homs había sido arropado por una plural representación tanto del Govern como de diferentes formaciones presentes en el Congreso español. Carles Puigdemont, actual president, su antecesor, Artur Mas, Oriol Junqueras, vicepresidente, arroparon al antiguo portavoz de la Generalitat. Junto a ellos, miembros de Unidos Podemos, En Comú Podem, En Marea, Compromís, así como de PNV y EH Bildu.

Todos coincidieron en denunciar el carácter «político» del proceso que se seguirá contra el portavoz independentista. Puigdemont cargó contra los que avalaron el suplicatorio. «PP, Ciudadanos y PSOE, con el concurso del PSC, van a llenar de piedras la maleta del diálogo y lo van a hacer más difícil», afirmó. En la misma línea, Artur Mas tachó de «vergüenza para España» el proceso contra Homs, recordando que su única acusación es defender «la idea de la libertad para Catalunya».

Después de los llamamientos al diálogo por parte de La Moncloa, el rodillo unionista avaló juzgar las urnas del 9N.

El TSJC cita a Forcadell por «desobedecer» al TC y permitir un debate

El Tribunal Superior de Justicia de Catalunya (TSJC) citó ayer a declarar para el próximo 16 de diciembre como investigada a la presidenta del Parlament, Carme Forcadell, a raíz de la querella que presentó contra ella la Fiscalía por desobediencia al Tribunal Constitucional español. En una providencia, la magistrada del TSJC Maria Eugènia Alegret, que instruye la querella de la Fiscalía, acuerda citar a Forcadell como investigada. Tras su declaración, a las 9,30 horas de la mañana, el TSJC ha llamado a como testigos para el 19 de diciembre al vicepresidente segundo de la Mesa del Parlament, José María Espejo, de Ciudadanos, al secretario segundo, David Pérez (PSC), y al secretario tercero, Joan Josep Nuet, de CSQP. La mayoría política catalana (JxS y CUP) rechazaron una nueva causa contra el soberanismo. GARA