Tal como dio a conocer ayer LAB, el joven A.R.J., de 24 años, murió el lunes como consecuencia de las heridas sufridas en un accidente laboral durante su último reparto de pizzas del 30 de diciembre. El fallecido trabajaba para la pizzería restaurante Mec Mec de Gorliz.

El sindicato, que trasladó su apoyo y solidaridad a familiares, vecinos y vecinas, y personas allegadas de la víctima, indicó que «detrás de la mayoría de los accidentes de trabajo se encuentran unas condiciones de trabajo precarias: falta de formación, ritmos de trabajo salvajes, subcontratación, sobrecargas de trabajo, etc». Y reiteró que «a día de hoy no se cumple realmente la legislación en prevención de riesgos laborales, por lo que debemos exigir su cumplimiento real, ya que tanto las empresas como las administraciones públicas no muestran ningún compromiso real».

Por ello, ELA, LAB, ESK, Steilas, EHNE e HIRU seguirán «denunciando cada accidente de trabajo e exigiendo a las empresas y a las administraciones públicas mejoras en este ámbito». En esta ocasión, han convocado una concentración el viernes, a las 12:30, frente a la central de la empresa Mec Mec en Sopela.

Acto en Donostia

Una movilización convocada por las mismas centrales sindicales se llevó a cabo ayer en Donostia al hilo de la muerte de J.L.L.G., que el martes de la semana pasada fue encontrado muerto, al parecer por causas naturales, en el interior de su camión en Oñati.

La mayoría sindical recordó que, como ocurre en otros sectores, «las condiciones laborales de los y las transportistas son cada vez más precarias». Además, indicaron que «al ser en su mayor parte trabajadores autónomos, no cuentan con protección social adecuada en materia de accidentes de trabajo y enfermedades profesionales, y los accidentes laborales que sufren los autónomos transportistas muchas veces no se contabilizan en las estadísticas oficiales».